Las cinco fuerzas políticas que componen la corporación municipal del Concello de Vilagarcía (PSOE, PP, Esquerda Unida, BNG y Somos Maioría) continúan sin ponerse de acuerdo sobre la cuestión organizativa municipal. Asuntos como salarios, liberaciones y cargos de confianza siguen siendo los escollos que impiden al gobierno municipal adjudicar las áreas de responsabilidad.

Por otra parte, el principal partido de la oposición (PP), mostrando una más que evidente ambición de poder, propone ahora formar una coalición (PSOE-PP) para una gestión compartida. ¡Lo que hay que oír!

Así las cosas, me pregunto si este tira y afloja, que ya dura dos largos meses, persigue optimizar la operatividad política municipal o se debe, en realidad, a un desaforado afán de protagonismo y notoriedad de nuestros políticos locales. Tanto es así, que los leones de piedra que flanquean la entrada del Concello, cuando los ven llegar, se miran de soslayo y esbozan una burlona sonrisa de complicidad.