Hace unos días, en una de las visitas semanales que le hago a mi madre en una residencia de la tercera edad, estuve hablando con un residente llamado Silvio sobre una de las opciones para rebajar la elevada tasa de paro que tenemos en nuestro país.

Este residente tiene cerca de ochenta años y, como otros de su edad que se encuentran fuera de "circulación", todavía pueden aportar conocimientos valiosos para los jóvenes.

Su opinión era que se puede reducir el paro entre los jóvenes haciendo el servicio militar obligatorio.

Estando totalmente de acuerdo con él, y consiguiendo información, compruebo que los costes de mantener un ejército de doscientos mil efectivos equivale a lo que reciben doscientos mil jóvenes en el paro.

La propuesta es hacer el servicio militar obligatorio durante un año, con tres meses de formación militar y los nueve meses restantes emplearlos en los servicios que requieren las distintas bases del Ejército, dedicando una parte del tiempo en formación para la vida civil profesional, además de enseñarles otros valores como son: el valor, la honradez, el respeto por los demás.....

Para las misiones especiales que tiene el Ejército español en el mundo sería conveniente tener unos efectivos de cinco mil militares, pasando los veteranos a instruir a las incorporaciones que se producen todos los años.

Israel tiene una población de ocho millones de habitantes y su ejército y las empresas de ese país son de lo mejor del mundo empleando ese sistema de formación militar y profesional para la vida civil.