TabkarHaddi es una mujer saharaui que está en huelga de hambre por tiempo indefinido desde el 15 de mayo frente al Consulado de Marruecos en Gran Canaria. Reclama el cuerpo de su hijo, Mohamed LaminHaidala, asesinado por colonos marroquíes en El Aaiún, capital del Sáhara Occidental ocupado.

En rueda de prensa el 14 de mayo, TabkarHaddi dijo que el 31 de enero, alrededor de las 21.00 horas, los propietarios marroquíes de una tienda al lado de la casa de los abuelos Mohamed LaminHaidala le tiraron piedras, a lo que respondió con insultos. Una de esas piedras golpeó el pecho del joven de 21 años, que cayó al suelo. Los comerciantes de inmediato comenzaron a golpearlo y uno de ellos lo apuñaló en el cuello con unas tijeras, a consecuencia de lo que Mohamed perdió el conocimiento.

TabkarHaddi relató que la policía marroquí tardó más de una hora para llevar a cabo el registro de incidentes, mientras el joven yacía sangrando en el piso. Después el joven fue llevado al hospital de El Aaiún, donde la lesión fue cosida por un enfermero sin anestesia y sin ser desinfectado.

Seguidamente Mohamed fue trasladado a la comisaría central de policía, donde, según la madre, permaneció detenido durante dos días sin una manta o un colchón. El 2 de febrero fue llevado al hospital, donde murió el día 8 del mismo mes.

Los médicos se negaron a facilitar cualquier escrito a la familia y TabkarHaddi asegura que las autoridades marroquíes le ofrecieron 90,000 euros por guardar silencio y no reclamar el cuerpo de su hijo.

La casa de la familia en El Aaiún permanece rodeada por las autoridades marroquíes y hasta el momento los colonos que desencadenaron este ataque no fueron detenidos.

Con 42 años, y residente en Tenerife hace 10, esta madre de tres hijos reiteró su disposición a morir si no puede recuperar los restos de su hijo para que pueda ser enterrado con dignidad.