Lo mejor de la idea de A3, Onda Cero y Tráfico es eso, ponle freno a los accidentes.

Es el freno el único que puede acabar (bueno, casi) con los accidentes, todo por la velocidad. No sólo en carretera (accidentes mortales), sino también en ciudad (sales con el tiempo justo, corres, adelantas donde no debes); ¿cuál es el problema? Aquí se equivoca A3, Onda Cero y la DGT, no son los puntos negros: una curva mal señalizada, un quitamiedos, un hoyo en la carretera, ¡no! Los puntos negros somos los conductores, precisamente por no poner freno.

¿Sería muy difícil poner un dispositivo a automóviles y motocicletas que marquen la velocidad a la que circulaban en ese momento, ya sea en zona urbana o carretera? ¿Saben lo que esto evitaría? No harían falta radares (yo los llamo cazadores, pues son como las ratoneras para los ratones), no haría falta incordiar a la gente con tantos controles; simplemente parar de vez en cuando a uno y con ese dispositivo decirle: te pasaste aquí, aquí y aquí, baja y ve a pie. Hay quien piensa en limitar la velocidad del automóvil, pero eso sería sólo un parche, sería para las autovías o autopistas, 120.

La Administración, ¡sí puede hacer más en los pasos peatonales! Miren ustedes, los pasos peatonales en carretera (aldeas, entre pueblos...) no sólo están ubicados en mal sitio, sino que no tienen en el 90% de los casos la luz pública, que en tiempos de lluvia y niebla, ayudan a percibirlos. Lo mismo en pueblos y ciudades, aquí con agravantes, furgonetas o camionetas paradas (puede que trabajando) al lado de un paso peatonal, que es totalmente legal, pero para los conductores, aún yendo a 30, por falta de visibilidad, se convierte ese punto en una guillotina. La verdad, no sé como hay tan pocos accidentes en esos puntos, tal vez, aún existen los ángeles de la guarda. Esto es lo que pienso de los puntos negros, de cómo se pueden evitar, pero como ven ustedes, sólo la Administración con algunas reglas puede hacerlo... salvo que no sea rentable.