Las parodias políticas suelen funcionar, ya sea en los programas de televisión, en los monólogos de los cómicos o en las letrillas del Carnaval. En Vilanova lo saben bien, donde llevan años triunfando con una visión ácida y penetrante de la actualidad política en su Festa do Momo. Y así volvió a ser ayer, donde la identidad secreta del personaje que muta cada año resultó ser la del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Pero el muñeco del político socialista no estaba solo. A los mandos de su avión Falcon -Sánchez ha sido muy cuestionado por lo mucho que ha viajado y empleado este avión durante los últimos meses- con una sonrisa de oreja a oreja, gafas de sol, impecable camisa blanca y corbata, tenía a sus espaldas a Francisco Franco, que iba vestido con sus mejores galas militares y le iba haciendo una peineta.

El Momo de Vilanova es una de las grandes citas del Entroido gallego. Se estima que congrega cada año a entre 15.000 y 20.000 personas, gracias a la espectacularidad de las carrozas que participan en el desfile y la presencia de estrellas del mundo de la televisión y el cine. Ayer, destacaba por encima de todos el actor gallego Luis Zahera, recientemente premiado con un Goya. Iba sobre la carroza del Momo, que iba decorada en sus laterales con fotomontajes, en los que se veía por ejemplo a un Franco joven dirigiéndose a los independentistas catalanes en el primer día del juicio del Procés, a Manuel Fraga, o al alcalde vilanovés, ataviado como Fredy Mercury.

Pero el Momo de Vilanova no impresiona solo por la carroza central, ya que son muchas las representaciones que asombran por su originalidad o lo cuidado de sus elaboraciones. Un enorme dragón hecho con globos rojos y amarillos, una carroza del amor que recreaba los mundos de Cupido, un océano con sus pulpos, centollos y sirenas, un safari... El Momo puede competir en vistosidad y color con los mejores Carnavales de otras comunidades.

La fiesta contó con un importante dispositivo de seguridad formando por una treintena de personas, entre agentes de la Policía Local y voluntarios de Protección Civil de Vilanova. Acudieron a ayudar en el operativo miembros de las agrupaciones de Protección Civil de Ribadumia, Vilagarcía, Pontevedra y A Pobra do Caramiñal.

El tiempo ayudó, y aunque por la mañana llovió un poco, finalmente la tarde no cayó ni una sola gota, de modo que el numeroso público congregado en las aceras pudo disfrutar sin sobresaltos.

Suspendido en Valga

Durante la jornada de ayer se celebraron fiestas de Entroido en otras localidades de O Salnés. Es el caso de Carril, donde cerraron los festejos con el Enterro da Sardiña. Donde no fue posible fue en Valga, que decidió a media mañana suspender definitivamente el desfile porque las previsiones meteorológicas indicaban que llovería por la tarde.

Pero el Entroido todavía no ha terminado en O Salnés, ya que el desfile de disfraces y carrozas de Vilagarcía será el domingo que viene, día 17. El evento es competitivo, e incluso un concurso para los mejores disfraces de "choqueiro".