Las caravanas camper no son tan lujosas como las nuevas autocaravanas de alta gama pero son más carismáticas. La creatividad es arte y se paga, por eso el modelo que exponemos a continuación es una pieza única de tanto valor.
El mecánico Steve Jones creó la VC10 Caravan Pod, caravana hecha con el motor de un avión Rolls-Royce Vickers VC10 de 1967 que estuvo al servicio de la Royal Air Force durante 45 años. Voló durante 38.383 horas hasta el año 2012, cuando uno de sus propulsores acabó en un desguace, propiedad de un conocido de su futuro propietario.
Las casas rodantes se ciñen al tamaño de las furgonetas y se expanden hasta convertirse en un autobús, depende de la experiencia de su propietario, que se percató en 2020 de que tenía una nueva necesidad: casi la mitad de los españoles se compraron una caravana en 2020 para disfrutar la vida en comunidad tras el impacto del confinamiento.
Debido a las restricciones de movilidad internacional por causa de la pandemia, el verano de 2020 la venta de autocaravanas creció un 26,6%, tras el trimestre estival se matricularon 2.651 caravanas según los datos de la Asociación española de la Industria y el Comercio del Caravaning (ASEICAR) y de la Asociación Nacional de Vendedores de Vehículos a Motor, Reparación y Recambios (Ganvam). Las ventas de la alternativa más económica, las campers, también aumentaron en ese período un 35%.
La caravana hecha con un motor de avión Rolls Royce
El mecánico es un experto en diseñar y construir campers con motores de avión, de hecho su sueño es conseguir el propulsor de un Boeing 747 para convertirlo en una autocaravana de dos pisos.
Cuando su amigo lo avisó de su hallazgo, Jones ya tenía una idea de qué hacer con ella y le dio 4.900 euros por la pieza. Cuando se hizo con ella la llevó a su casa, donde la vació y la forró en fieltro. En 1.000 horas de trabajo había terminado tanto su estructura como los muebles del interior.
En la apertura delantera del motor Jones ha colocado una gran mampara de cristal, para conseguir luz natural durante todo el día. En la parte trasera hay una segunda ventana abatible junto a la puerta y la mitad delantera se abre en un lateral desde la zona del comedor, unas cualidades que logran una comunión perfecta con el exterior.
El mecánico no quiere, por lo menos de momento, vender su recién estrenado vehículo. Su misión es disfrutarlo con su familia.
Lo que sí puede hacer si deseara sacarle rentabilidad es alquilarla, este sector experimentó también desde la pandemia un auge de un 29,38%, su máximo histórico, según los datos de Indie Campers.
Aunque nuestro país tiene mucha tradición, el 40% de los españoles que alquiló caravanas lo hizo por primera vez en 2020.
Cuesta de media entre 70€-200€ por noche, pero la crudeza del aislamiento cautiva a los viajeros nacionales, prendados de las ventajas de este estilo de vida.
