Portugal está en estado de shock. El asesinato de una niña de 9 años, Valentina, en el distrito de Leiria, ha sacudido a los portugueses que, en medio de su desescalada por el coronavirus, asisten sobrecogidos al desarrollo del crimen.

Pero esta últimas horas, los detalles de la investigación han pasado a un segundo plano después de que el medio Correio da Manha publicase una entrevsita en la calle de un vecino de la familia de la pequeña asesinada y en la que aparece con la cara cubierta con una berza como método para evitar un posible contagio de coronavirus.

La imagen, que corre como la pólvora por las redes sociales y en forma de mensajes de WhatsApp por medio mundo, no ha dejado indiferente a nadie. Son poco más de 20 segundos, pero no solo sorprende la mascarilla biodegradable del entrevistado sino también porque el reportero no parece sorprendido por lo que ve.

El periodista, que acudía a la localidad portuguesa en la que se había producido el suceso, entrevista a un vecino de la familia en plena calle al protagonista de este nuevo viral. Allí, ante el micrófono, responde a las preguntas: "Solo los vi entrar, vi poca cosa", explica el protagonista. "Era una pareja muy reservada", añade poco después.