Una promoción para la historia y el ejemplo

«Volver a clase ha sido como volver a vivir» dijo uno de los 19 vilagarcianos que, con diploma en mano y emoción en el rostro, celebró su graduación en el programa universitario IV Ciclo. Lo hicieron en un abarrotado Salón García, en un acto que fue mucho más que una ceremonia académica: fue la culminación de un viaje vital marcado por la curiosidad, la superación personal y las ganas de seguir aprendiendo.

El IV Ciclo Universitario para Mayores, impulsado por la Universidad de Santiago de Compostela (USC), es una oferta formativa pionera dirigida a personas mayores de 50 años que desean seguir formándose sin importar su experiencia previa. En Vilagarcía, este programa echó a andar hace cuatro años, en el Centro de Formación de Matosinhos, gracias a un convenio con el Concello. Ayer, sus primeros egresados recogieron el fruto de un esfuerzo que fue, sobre todo, una conquista personal.

El acto de graduación fue un emotivo homenaje a la constancia y el deseo de aprender. Asistieron autoridades como la vicerrectora de Estudantes e Cultura, Pilar Murias, el alcalde Alberto Varela, el delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Agustín Reguera, y la directora del programa, la profesora Esther Olveira. Junto a ellos, profesores, familiares y compañeros de otras sedes llenaron el salón, que vibró con la actuación del coro Voces Amigas y los aplausos a cada entrega de diplomas.

Uno de los momentos más especiales llegó con la intervención de la madrina de la promoción, Dolores Barral, figura muy querida por el alumnado. No solo fue docente, sino también guía y cómplice en salidas culturales que ayudaron a conectar la teoría con la vida. Su discurso simbolizó la estrecha relación entre profesores y estudiantes que enriqueció la experiencia.

Vilagarcía se convierte así en la más reciente sede del IV Ciclo, junto a Santiago, Lugo y Ribeira. Y sus 19 graduados son los primeros en portar el Diploma Sénior en la ciudad, marcando un hito en la historia educativa local. El éxito del programa —que actualmente cuenta con 50 alumnos en la localidad— no ha hecho más que reforzar el vínculo entre la USC y el municipio.

El alcalde, Alberto Varela, lo resumió en su intervención: «Esta iniciativa demuestra que la Universidad puede abrirse a todos los públicos, que el conocimiento no entiende de edades, y que Vilagarcía tiene mucho que aportar y que recibir en este camino conjunto».

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