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Cacabelos propicia que el festival Son do Mar se marche a Cambados

El alcalde de O Grove se opuso al evento, alegando que reduciría plazas de aparcamiento

El gobierno cambadés vio la oportunidad y ofreció a los promotores todas las facilidades posibles

Va a celebrarse en O Pombal los días 24, 25 y 26 de julio

Podría aprovecharse la estructura para los Conciertos del Albariño

El tributo a Queen en la pasada edición del Son do Mar.

El tributo a Queen en la pasada edición del Son do Mar. / M. Méndez

Manuel Méndez

Manuel Méndez

O Grove / Cambados

Aunque los promotores del festival Son do Mar y el gobierno de Cambados se niegan a confirmarlo e incluso sostienen que no hay nada cerrado, puede decirse que el evento, que iba a desarrollarse en la zona portuaria de O Corgo (O Grove), tendrá lugar finalmente en la villa del albariño.

Los detalles se darán a conocer, muy probablemente, una vez superadas las celebraciones de carnaval, pero el cambio de ubicación ya está decidido, y el entorno de O Pombal es el lugar elegido.

Festa do Albariño

Incluso se baraja la posibilidad de que el montaje del Son do Mar, los días 24, 25 y 26 de julio, pueda ser aprovechado para desarrollar días después los conciertos de la Festa do Albariño, puesto que reutilizar toda la estructura acarrearía un ahorro considerable para las arcas municipales.

José Antonio Cacabelos Rico, el alcalde socialista de O Grove, se sale así con la suya, puesto que se opuso desde un primer momento a la celebración del Son do Mar en la zona portuaria de Corgo, alegando que supondría la pérdida de numerosas plazas de estacionamiento durante días.

Portos de Galicia, el ente público al que pertenece el terreno de O Corgo elegido, dio permiso a los empresarios Virvi Fraga y Nacho Escalante, promotores del Son do Mar.

Y en días posteriores recibieron un enorme respaldo a través de las redes sociales, además de lograr un firme pronunciamiento favorable de Empresarios Grovenses de Bens e Servicios (Emgrobes), junto a un insólito posicionamiento, también a favor, de todos los grupos políticos de la oposición municipal: PP, EU y BNG.

Pero Cacabelos, aún quedándose solo en su cruzada contra el Son do Mar, quiso mantenerse firme e insistió en frenar el acontecimiento programado.

Aún así, y a pesar de los intentos fallidos anteriores, Virvi Fraga y Nacho Escalante buscaron un nuevo acercamiento con el alcalde meco –esta misma semana–, tratando de mantener el evento en O Grove, convencidos de que supondría un importante beneficio para la economía local.

Pero nada dio resultado y, con los contratos cerrados de algunos artistas solo pendientes de la ubicación del concierto, no tuvieron más remedio que escuchar ofertas de otras localidades.

Fueron cuatro los municipios que se brindaron a albergar el Son do Mar, pero finalmente fue Cambados el que se llevó el gato al agua, pues el gobierno del también socialista Samuel Lago y el independiente Tino Cordal dieron a Fraga y Escalante todo tipo de facilidades.

Respaldo social

Dicho de otro modo, que a pesar del enorme apoyo social, político y empresarial recibido –el cual agradecieron desde el primer momento–, los empresarios se han topado con un insalvable obstáculo en el gobierno grovense.

De ahí que ante el temor a no conseguir la licencia municipal y la posibilidad de perder la inversión realizada con los precontratos, se hayan visto forzados a irse.

A la espera de acontecimientos y, sobre todo, de ver cómo repercute en la imagen de Cacabelos el hecho de haber dejado escapar el festival, puede decirse que el gobierno de Cambados y Son do Mar lo tienen todo atado.

Los conciertos van a desarrollarse durante el puente de Santiago Apóstol, como antesala de la Festa do Albariño, en una superficie de unos 8.000 metros cuadrados. Se ofrecerán entre las 20.00 y las 02.00 horas, lo cual contribuirá a generar ambiente y riqueza en la villa cambadesa. Muy especialmente en los locales de ocio nocturno, que era lo que inicialmente se buscaba para los establecimientos mecos.

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