El merecido homenaje a quien siempre rinde tributo a los peregrinos

El próximo jueves 23 de enero, a las 18.00 horas, la capilla de San Pedro de Mouzos, en la parroquia vilanovesa de Tremoedo, será el escenario de un emotivo homenaje a José Prado Viñas, un vecino de 98 años cuya vida ha estado marcada por la entrega y el compromiso con los peregrinos que recorren el Camino Portugués en su variante espiritual.

Durante años, Prado Viñas se encargó de abrir diariamente esta capilla en la temporada alta, ofreciendo un espacio de encuentro, descanso y reflexión para miles de caminantes. Su labor desinteresada convirtió la capilla en un punto clave del itinerario, destacando no solo por su valor arquitectónico y espiritual, sino también por la cálida hospitalidad que allí se ofrecía.

La capilla de San Pedro de Mouzos, construida en 1978 por Jaime Prado Abal, hijo de José Prado Viñas, es un símbolo de devoción y esfuerzo comunitario. Jaime dedicó buena parte de su vida a este proyecto, desde su construcción inicial hasta su reconstrucción en 1999, que contó con el apoyo del Concello de Vilanova, la Diputación y los vecinos de la parroquia. Tras su fallecimiento en 2022, la capilla continúa siendo testimonio del legado de Jaime, con una placa en su fachada que narra brevemente su historia y su relevancia para la comunidad.

Cada mañana en la que José Prado abre la puerta de la capilla cumple con su compromiso, no solo con los peregrinos, sino con la obra de su propio hijo. Un motivo de orgullo durante muchos años y que, desde su fallecimiento, ha añadido el componente de reconocimiento de un padre a la memoria de su hijo.

El acto de homenaje contará con la presencia del Arzobispado de Santiago y varios sacerdotes párrocos, quienes quieren rendir un reconocimiento oficial al ejemplo de vida de José Prado Viñas. La ceremonia, cargada de simbolismo y espiritualidad, será un tributo a su labor como custodio de la capilla y como referente para la comunidad local.

La historia de la capilla y de la familia Prado es también un reflejo de la unión de esfuerzos en torno al patrimonio cultural y espiritual del Camino de Santiago. La dedicación de José Prado Viñas, junto al legado de su hijo Jaime, han hecho de la capilla de San Pedro de Mouzos un lugar emblemático para los peregrinos y la comunidad de Tremoedo, donde tradición y hospitalidad caminan de la mano cerca de medio siglo después que abriera por primera vez sus puertas.

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