Un Ford Focus y 3.100 euros: cerco a los autores del violento asalto en Meis
La pareja, que fue brutalmente agredida, ya ha recibido el alta hospitalaria

Agentes de la Guardia Civil, en la casa donde ocurrieron los hechos. / Iñaki Abella
R. V. / Anxo Martínez
La Guardia Civil ha localizado uno de los vehículos utilizados por los asaltantes del violento robo vivido ayer en Meis, un Ford Focus. Este apareció en una zona relativamente próxima a la vivienda donde ocurrieron los hechos, en el mismo municipio.
Los sospechosos son tres hombres, se cree que gallegos, que se llevaron 3.100 euros en efectivo de la vivienda de las víctimas, una pareja de unos 50 años. Según su testimonio, los individuos los abordaron cuando salían para trabajar, sobre las 5.30 horas, les obligaron a meterse de nuevo en casa y les robaron tras agredirlos brutalmente. A la mujer llegaron a rociarla con gasolina y a amenazarla con una pistola.
La investigación ha registrado importantes avances en las últimas horas para esclarecer el porqué del asalto cuyo 'modus operandi' tiene un grado elevado de ensañamiento. Las pesquisas se centran ahora tanto en la pareja asaltada como en su entorno.
Tras los hechos, llegó una ambulancia del 061 hasta el punto, que se encargó de trasladar a la pareja al servicio de Urgencias del Complexo Hospitalario de Pontevedra (CHOP), donde permanecían ingresados a primera hora de la mañana de ayer. En estos momentos, ya han recibido el alta y evolucionan favorablemente de sus contusiones.

Robo con extrema violencia en Arousa: asaltan a punta de pistola a una pareja y la rocían con gasolina en Meis / Iñaki Abella
Pidieron ayuda en casa de unos vecinos
El Instituto Armado tuvo conocimiento de los hechos sobre las 7 de la mañana. Minutos antes, la mujer atracada salió de su casa y bajó la cuesta hasta la casa de unos vecinos. Cuando le abrieron, estaba visiblemente alterada y les pidió que llamaran a la policía. Estos fueron a buscar el teléfono, pero cuando regresaron, la mujer ya había salido corriendo hacia otra vivienda del lugar. Fue desde esta segunda vivienda desde donde, al parecer, alertó de lo sucedido a la Guardia Civil.
Aún no había amanecido cuando llegaron al lugar las primeras patrullas. Tomaron un primer testimonio a las víctimas, un hombre de unos 50 años y su exmujer, con la que había vuelto a vivir tras un periodo de separación. Ambos residían en la casa de los padres del varón, que estaban arreglando poco a poco. Se trata de una vivienda de aspecto humilde, sin pintar, pero dotada de un sistema de alarma y videovigilancia. La pareja también tiene en la finca un pastor alemán. Medidas de seguridad que no fueron suficientes para evitar el violento atraco.
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