Ribadumia tendrá que pagar 30.100 euros a una extrabajadora municipal

Somos acusa al alcalde de gastar dinero público en «guerras personales» | El Concello presenta recurso sobre la cantidad

Piedefotografía. |  FirmaFoto

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El Concello de Ribadumia tendrá que indemnizar con 30.100 euros a una extrabajadora municipal después de que el juzgado le hubiese dado la razón en el litigio que mantiene con la administración por «negarle su derecho a una pensión primero y a una indemnización después, motivadas por accidente laboral».

La noticia no ha pasado desapercibida para Somos Ribadumia que, ayer, emitió un comunicado en el que lamentaba que el alcalde, David Castro, «siga gastando dinero público y de los vecinos de Ribadumia en guerras personales, en las que no deja de acumular palos judiciales». En este sentido, censuran que el Concello haya recurrido la sentencia favorable a esta trabajadora, en contra de la decisión adoptada por la Seguridad Social y la Mutua «con la intención de que se denegara el derecho a que se le reconociese una incapacidad permanente, lo cual afectaba directamente y en una cantidad importante al importe de la pensión de la mujer».

Para la formación que dirige Sergio Soutelo , entiende que «Castro ha perdido esa batalla judicial y todos los recursos que presentó, todos ellos pagados con fondos públicos». Posteirormente, la trabajadora reclamó su derecho a percibir una indemnización recogida en el convenio laboral y «el Concello presentó alegaciones contra esa reclamación y, hace unas semanas. El 26 de noviembre, el juzgado de lo social número 2 de Pontevedra dictó sentencia, dando la razón a la trabajadora, condenando al Concello a pagarle esta indemnización de 30.100 euros». La propia sentencia establece, continúan desde Somos Ribadumia, que el Concello no contaba en su momento con el seguro obligatorio que debería hacerse cargo de este tipo de indemnizaciones, por lo que tendrá que ser el Concello el que tenga que abonar esta cantidad con fondos públicos».

Además, el recurso presentado ahora, explican desde la formación, se centra en la cantidad que s ele ha reconocido a la mujer, «quedando el derecho de la trabajadora ya fuera de toda duda». Somos tiene claro que Castro «tiene un guerra personal con esta trabajadora es algo que es de conocimiento público y quedó patente desde el primer momento, algo que es inaceptable»

Desde la formación de Soutelo instan a David Castro a que «deje de usar los recursos públicos para dirimir sus cuestiones personales, que abandone esa dinámica de atacar a los trabajadores que no le ríen las gracias y de llevar al juzgado a cualquiera que no sea de su agrado, con comportamientos inaceptables en un alcalde».

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