La patrona de San Martiño advierte de las consecuencias de incumplir la ley

Mari Besada reclama seriedad y responsabilidad a los responsables del marisqueo a pie

La patrona mayor de San Martiño, Mari Besada, ayer.

La patrona mayor de San Martiño, Mari Besada, ayer. / FdV

Manuel Méndez

Manuel Méndez

Corren tiempos difíciles en la cofradía de pescadores San Martiño, donde el cruce de acusaciones vivido entre socios en tantas ocasiones anteriores se ha recrudecido en los últimos días, esta vez a instancias de un grupo de mariscadores de a pie que han situado a la patrona mayor en la diana de sus críticas.

Piden su dimisión por una supuesta intromisión en la gestión del marisqueo y la responsabilizan de otros problemas que ella misma, María del Carmen Besada, ha calificado de «bulos», tal y como se explicaba ayer.

Lejos de abandonar, la patrona se muestra más firme que nunca y adopta un protagonismo y una presencia de la que quizás había adolecido hasta ahora, ya que desde su elección ocupó una posición alejada del foco mediático.

Ahora da un paso al frente para plantar cara a lo que considera una «campaña de desinformación y manipulación de la realidad por parte de algunas personas que quieren engañar a los socios».

Algo que, como ella misma reconoce, no es nuevo, ya que «en los dos últimos años vemos con incredulidad como todo lo que se habla en la Xunta Xeral o bien no se transmite a los socios o les llega tergiversado por algunos de los representantes del sector de marisqueo a pie en los órganos de gobierno de la cofradía».

Campaña orquestada

Una «manipulación» que corresponde a «una campaña orquestada y obsesiva de contaminación permanente» que genera «un comprensible malestar» entre los mariscadores.

Desde siempre la Xunta Xeral concedió plena autonomía y confianza a los representantes de los mariscadores, para que sean ellos, con honestidad, responsabilidad y compromiso profesional, quienes colaboren con los órganos de gobierno trabajando por el sector para tratar de mejorar la organización de las tareas de la playa

María del Carmen Besada

— Patrona mayor de la cofradía de pescadores San Martiño de O Grove

Dicho de otro modo, que los representantes del marisqueo en la cofradía –o al menos alguno de ellos– impiden que los mariscadores puedan conocer «la verdadera situación y alcance de las decisiones que somete a votación y aprueba la Xunta Xeral».

Esto lleva a la patrona a recordar que ella solo tiene un voto y que no es suya la responsabilidad de transmitir los acuerdos al sector del marisqueo a pie, pues lejos de lo que dicen sus críticos, en cuanto a supuestas intromisiones, «desde siempre la Xunta Xeral concedió plena autonomía y confianza a los representantes de los mariscadores, para que sean ellos, con honestidad, responsabilidad y compromiso profesional, quienes colaboren con los órganos de gobierno trabajando por el sector para tratar de mejorar la organización de las tareas de la playa».

Pero, «lamentablemente», esa buena sintonía no existe. Lo que hay son «bulos y constantes campañas de desinformación por parte de esas personas, a pesar de que nunca se les puso más traba o límite que el obligado respeto y educación que deben tener con todos los asociados, aunque tengan opiniones o criterios distintos».

De este modo, Mari Besada espeta que todos los integrantes de la junta general de la cofradía, incluidos los representantes del marisqueo, deben actuar «sin discriminaciones, sin coacciones y sin amenazas».

Puntos de control

Y además deben hacerlo «cumpliendo la legalidad cuando se realiza el control del marisco y cuando se trata de cumplir las normas impuestas por el plan de gestión marisquera aprobado por la Consellería do Mar».

De no hacerse así, «las consecuencias pueden ser desastrosas tanto para los mariscadores como para la cofradía».

Por cierto, que «todas las decisiones en cuanto a topes, trabajos, limpiezas o resiembras» son acordadas por los encargados de dicho plan, es decir, Almudena Martínez Camiña, María José Castro Seoane y Ana Silva Vázquez.

La patrona y los integrantes de la junta general que la arropan.

La patrona y los integrantes de la junta general que la arropan. / FdV

«Son ellas las que dan las instrucciones a la bióloga para que se pidan los permisos oportunos, en virtud de una delegación que la Xunta Xeral hizo en esas personas confiando en su responsabilidad y trabajo».

Y la patrona les recuerda, a ellas y a los demás, que las personas que están en el punto de control «tienen las mismas gratificaciones de siempre, por lo que es vergonzoso escuchar lo contrario sin que esos representantes del sector a pie que se presentan como víctimas tuvieran la valentía de desmentir las falsedades propagadas».

Semilla, maquinaria y vigilancia

Para dar cuenta del trabajo realizado en pro del sector, Mari Besada llega a repasar la subvenciones conseguidas.

Explica, por ejemplo, que entre 2023 y 2024 «logramos más de 879.000 euros para la cofradía, de los cuales más de 456.000 fueron exclusivamente para el sector de marisqueo a pie.

Esto permitió, por ejemplo, adquirir semilla de bivalvos, eliminar basura marina y comprar maquinaria. «A mayores, una subvención para contratar vigilantes y asistencia técnica, además de aprobarse por la Xunta Xeral la inversión 261.000 euros en semilla exclusivamente para el marisqueo a pie».

Asimismo, «por petición de los representantes del marisqueo a pie se aprobó la compra de una máquina limpia-algas para con fondos propios de la cofradía», destaca Mari Besada.

Esto la lleva a concluir que «queda claro que no solo se sigue disfrutando de las mismas subvenciones, sino que incluso se lograron más ayudas para el sector de marisqueo a pie».

«Amenazas, presiones, coacciones y acosos»

Lejos de lo que argumentan sus detractores, Mari Besada niega injerencia alguna en el marisqueo a pie. Muy por el contrario, sus propuestas fueron aprobadas por la Xunta Xeral y siempre recibieron asesoramiento de los empleados de la cofradía y sus servicios jurídicos.

Lo que quiere decir es que «no hay ninguna traba o limitación», y así trató de explicársele en su momento a los propios representantes del marisqueo, «obteniendo siempre la callada por respuesta, pero sin dejar de presentarse como víctimas ante el sector, propiciando bulos y falsedades únicamente para buscar el desprestigio de esta institución y sus dirigentes, que fueron democráticamente elegidos».

La representante del marisqueo a pie, Almudena Martínez.

La representante del marisqueo a pie, Almudena Martínez. / M. Méndez

En el mismo sentido, Mari Besada niega las «amenazas, presiones, coacciones y acosos que dicen que están recibiendo los encargados del control de marisqueo a pie, por lo que en lugar de difamar deberían dar la cara y aclarar a qué se refieren, puesto que en el registro de entrada de la cofradía no han puesto una sola queja o denuncia».

«No fui escogida a dedo»

Para responder y desautorizar a sus detractores, Mari Besada también les recuerda: «No fui escogida a dedo como patrona mayor, puesto que hay que superar dos votaciones".

Primero "cada sector elige a sus representantes para la Xunta Xeral, siendo 12 del marisqueo a pie, entre los que fui la sexta más votada, por lo que pasé al siguiente trámite electoral, como es la designación de los puestos de patrón, vicepatrón primero y segundo y de vocales del cabildo».

Esos cargos «deben ocuparlos algunos de los 24 miembros de la Xunta Xeral, y fue en esa votación cuando resulté elegida como patrona mayor, con 16 de los 24 votos».

De ahí que decir que fue designada a dedo sea «una aberrante acusación, pues estamos en una democracia y los líderes se eligen por la decisión mayoritaria de quienes fueron previamente elegidos».

Una de las protestas contra la patrona mayor.

Una de las protestas contra la patrona mayor. / FdV

Esto lleva a Mari Besada a decir que, visto lo visto, «se puede entender perfectamente que ninguno de los miembros de la junta general que ocupan el punto de control obtuviera la confianza de los demás integrantes electos, mientras que yo sí la tuve, por mucho que les pese».

¿Qué pasó con el cese del marisqueo?

Otra de las cuestiones que generan controversia es la decisión de no solicitar el cese de actividad para el marisqueo. Mari Besada explica que a finales de 2023 la encargada de esa sección, Almudena Martínez Camiña, «convocó una asamblea e informó a los asociados de que no era partidaria de cesar la actividad, tuvo el apoyo del sector y no se sometió a votación».

Ya a finales de julio de 2024, hubo una asamblea por lo mismo, y una votación secreta, resultando que «por mayoría se acordó pedir el cese de actividad».

Por eso Mari Besada y Almudena Martínez se reunieron en agosto con la Consellería do Mar, «donde nos comunicaron que la cofradía de O Grove no tenía derecho a pedir las ayudas, dada la situación en que se encontraba».

Y lo que sucede, asegura la patrona, es que «desde aquel momento, Almudena Martínez Camiña, como encargada del marisqueo a pie, no comunicó a la cofradía ninguna otra intención de pedir el cese».

Tracking Pixel Contents