El sector mar-industria reclama unidad en torno al mejillón
Todos parecen coincidir en que la histórica división de los productores es su gran lacra
Preocupan la falta de relevo generacional, la «desunión», la «falta de liderazgo» y los competidores
Vuelven a poner como ejemplo a la Denominación de Origen Rías Baixas
El Consello Regulador da Denominación de Orixe Protexida (DOP) Mexillón de Galicia se hace eco del sentir de productores, depuradores, conserveros y comercializadores ante la situación del sector, tratando de identificar fortalezas y debilidades para planificar el futuro del mismo a diez años vista.
En su último boletín informativo del año, el órgano rector que preside Mané Calvo aporta los testimonios de destacados dirigentes y empresarios, como también el punto de vista de los bateeiros de base –los «de la ropa de aguas»–, para concluir que la tan ansiada unidad es la asignatura pendiente y la herramienta fundamental que debe manejar la cadena mar-industria vinculada a la producción del «oro negro» de batea.
Acabar de una vez por todas con la fragmentación histórica que azota al sector, y lograr una mayor implicación en torno a la marca de calidad y origen Mejillón de Galicia, son las claves de un futuro con garantías que deje atrás viejas rencillas y evite campañas tan pésimas como la de 2023.
De ahí reflexiones como la siguiente: «Este sector siempre fue muy fuerte cuando estuvo unido, y ahora está muy fragmentado. Tenemos que estar unidos para hacer un Consello Regulador fuerte y diferenciarnos del resto ofreciendo calidad y orígen. El nombre de Galicia asociado a un producto de alimentación sigue vendiendo y el productor tiene que ser consciente del valor que aporta el sello de calidad de la DOP y de las consecuencias de no certificar su producto con esta marca».
Así consta en el espacio editorial del boletín de la DOP Mexillón de Galicia, convertido prácticamente en un monográfico sobre el «presente y futuro» de un sector que recuerda con cierta nostalgia los años ochenta, cuando «el 80% del sector estaba unido».
Llega a decirse que «nunca estuvimos tan bien» como entonces. Para añadir que «el consumidor tiene que percibir aspectos diferenciadores como el tamaño, el rendimiento de la vianda y la procedencia del producto».
Opmega
El mismo boletín informativo, lógicamente enfocado a modo de llamamiento a la incorporación de productores y empresarios a la DOP, aporta testimonios tan representativos como el del presidente de la Organización de Productores de Mejillón de Galicia (Opmega), Ricardo Herbón.
El rianxeiro aboga por «un cambio de rumbo» para «poner en valor el modelo productivo» y recobrar la unidad del sector, entendiendo que el actual modelo organizativo «es mejorable».
El sector mejillonero tiene una enorme resiliencia y una absoluta disposición a mantener en valor una producción vital para la socioeconomía de Galicia
Llega a apostar por «la creación de un organismo en el que se representen comercialización y organización para acometer problemas comunes».
Además de la creación de «mesas de trabajo transparentes en las que se aborden acuerdos en tiempo real y donde los productores puedan seguir día a día las decisiones de sus representantes».
Ricardo Herbón también se muestra tajante al asegurar que el modelo de comercialización de mejillón de Galicia no ayuda a defender la calidad del producto o a posicionarlo para acometer el futuro con garantías.
«Ese modelo no ayuda» a contrarrestar la falta de conocimiento del consumidor sobre el producto y su puesta en valor, sino que se necesita «una promoción y diferenciación de envasado clara y adecuada», así como «un cambio total de la estructura comercial», espeta Herbón.
Red comercial
Es por todo ello que el presidente de Opmega plantea que, a medio y largo plazo, es necesario «desarrollar la red comercial para que el productor sepa dónde se vende su producto y la repercusión del mismo», tratando de involucrarlo y que vea y valore «su aportación a la red comercial».
Solo así, considera el presidente de Opmega, podrá afrontarse un futuro en el que hacer frente a amenazas como «la entrada de producto foráneo mal etiquetado».
Una lucha que se debe hacer acompañar, a su juicio, de «una garantía de presencia continua del producto certificado en los mercados» y una mayor apuesta de las empresas por esa materia prima diferenciada.
Amebarraña
Vicente Deira, presidente de la Asociación de Productores de Mejillón de Barraña (Amebarraña), abunda en ello diciendo que «las expectativas no son buenas», ya que «hay problemas que nos están afectando».
Cita la caída de la producción de entre un 30% y un 40%, que el mejillón «no crece» o se desprende de las cuerdas, que los desoves son irregulares y que las larvas se mueren. «Y si no sabemos las causas de estos problemas para tratar de ponerles solución, las expectativas de futuro no pueden ser buenas», asevera.
El presidente de esta entidad con sede en Boiro apunta a la necesidad de «estar unidos» y se refiere a lo dicho anteriormente en cuanto a los buenos momentos de los años ochenta.
«La clave es la unión, pero ahora cada uno va por su cuenta», lamenta. «No puede ser que haya tantas agrupaciones –unas sesenta–; la Administración tiene que regularlas», propone Deira.
Para añadir que «el mejillón con sello de la DOP debe ofrecer a los consumidores aspectos diferenciales que tienen que ver con el tamaño o el rendimiento de la vianda».
Respecto a esa marca diferenciadora y las sensaciones del consumidor, cree que en la zona de costa la ciudadanía está más familiarizada con la DOP, mientras que «en el interior es más difícil, sobre todo si se trata de mejillón en conserva».
De ahí que proponga «que sea obligatorio que en los envases de las conservas aparezca la procedencia del mejillón en letras grandes que se puedan leer sin necesidad de una lupa».
Al aludir a «las incertezas del futuro», el presidente de Amebarraña no solo alude a los problemas antes descritos, sino también a los problemas con la mejilla derivados tanto de su escasez como del establecimiento de zonas en las que ahora se prohibe a los bateeiros obtener esa semilla. «Y sin materia prima la producción será muy inferior», sentencia.
Amegrove
Mexillón de Galicia también cita declaraciones efectuadas desde Amegrove, la entidad hasta no hace mucho dirigida por Francisco Padín y ahora en manos de Esteban Fernández Casal.
Desde Porto Meloxo (O Grove), este colectivo venido a menos en los últimos tiempos sostiene que «la situación actual del sector se caracteriza por la desorganización, la desunión y la falta de liderazgo» de un sector que, como se explicó en tantas ocasiones anteriores, está claramente condicionado por su atomización.
En Amegrove también sugiere que «el modelo actual no es el adecuado» y propone «cambios», entre ellos el de «conseguir la unión de los actores que forman parte de este sector», para poder «avanzar hacia un modelo más competitivo y establecer unos objetivos comunes por los que luchar».
No solo el organizativo, sino que el modelo comercial de la DOP tampoco satisface a la cooperativa de bateeiros meca. «Habría que mejorar a partir de la creación de una imagen de marca y trasladarla tanto al consumidor final como al canal Horeca –proponen en Amegrove–, pues la diferenciación respecto a otras propuestas que hay en el mercado es fundamental».
Una imagen de marca, calidad y diferenciación que en Meloxo consideran «el soporte adecuado» con el que combatir la actual «falta de posicionamiento en el mercado, que no permite llegar al consumidor final como se debería».
Hablan así en O Grove de «un desconocimiento que impide que se valore a Mexillón de Galicia como merece».
Para terminar, en Amegrove dicen no ver oportunidades de mejora y futuro en los próximos diez años, en gran medida debido a la «muy preocupante falta de relevo generacional».
A este respecto, creen necesario «atraer a nuestro sector a personas que le den continuidad y sean capaces de adaptar esta actividad a las nuevas necesidades del mercado».
APM Illa
José Manuel Oubiña, de la Asociación de Productores de Mejillón Illa de Arousa, coincide al señalar que «el sector productor está muy dividido desde hace mucho tiempo, y aunque no está mal, podía estar mejor con una organización más adecuada y la prestación de servicios como el barco de las toxinas, pues no puede ser que lo paguen las asociaciones y la gente que está fuera se beneficie de ese servicio».
En este sentido, el isleño cree que «una solución sería que todos estuviesen en el Consello Regulador, que además podría encargarse de recaudar las aportaciones para asumir ese tipo de gastos».
Convencido de que «si no trabajas con la calidad y el origen vas a tener muchos competidores en el mercado» que tirarán el precio, Oubiña recalca que el consumidor necesita tener garantías como las que puede ofrecer el Consello Regulador.
El ejemplo del albariño
Pone como ejemplo el mundo del vino, puesto que «antes cada uno vendía su cosecha propia, pero al final acabaron todos en el Consello Regulador Rías Baixas».
El representante de la APM Illa es uno de los que cuestionan el modelo de comercialización, al entender que «no todo el volumen que se certifica en los puertos llega a los lineales de los supermercados».
«Habrá que intentar que los productores certifiquemos todo, porque si a las cosas les das un valor acaban teniéndolo, y si se quiere un producto con sello de calidad hay que pagarlo», explica.
Al hilo de lo cual, el isleño añade que «el productor tiene que ser consciente del valor de lo que tiene y de las consecuencias de no certificar»; más aún cuando «el nombre de Galicia asociado a un producto de alimentación vende».
Pensando en el futuro, APM Illa se inclina por «diferenciarnos y distinguirnos del resto para no tener que competir a precio, porque no se puede». Y esto también requiere de «estar unidos».
Dolores Otero: «Hay que primar la calidad»
Desde Conservas Dardo, una de las firmas transformadoras más implicadas en la producción de mejillón de calidad y gallego, indican que «parece recuperarse el pulso en los mercados, a pesar de luchar con una competencia masiva de producto de muy diversas procedencias».
Frente a esto, Dolores Otero apuesta por «potenciar y primar la calidad del mejillón, principalmente el grosor y tamaño, evitando comercializar mejillón pequeño y flaco, ya que desprestigia al producto y repercute en todas sus formas de comercialización».
Saben en Dardo que «hay mucho camino por recorrer», pero también que «en la unión está la fuerza», por lo que proponen «potenciar más la unificación de los productores y el sello de la DOP».
En esta conservera arousana también explican en el último boletín de Mexillón de Galicia que «un alto porcentaje del mercado compra únicamente por precio, sin tener en cuenta la procedencia o calidad del mejillón; es solo una pequeña minoría, que podríamos englobar en el sector gourmet, la que sí valora el origen Galicia por encima de otras procedencias y está dispuesta a pagar por el valor del producto».
El sector conservero necesita un producto de alta calidad con un tamaño adecuado a la demanda del consumidor
Es por ello que la representante de Conservas Dardo insiste en promover «la unificación del sector en torno al sello DOP y potenciar más si cabe el valor organoléptico y nutricional del Mexillón de Galicia».
Ante los retos de futuro, Dolores Otero explica que «la mayor incerteza es el cambio climático», pues está por ver cómo se adapta la especie «Mytilus galloprovincialis» a los cambios que experimentan las rías, «tanto por el calentamiento del agua como por otros factores».
Margarita Hermo: «Sugiero respetar el ciclo de cultivo»
Margarita Hermo, de Jealsa Rianxeira, advierte en el boletín de la DOP Mexillón de Galicia de que «el sector conservero necesita un producto de alta calidad con un tamaño adecuado a la demanda del consumidor, lo cual hace necesario adecuar las líneas de trabajo para ofrecer el mejor producto posible y que el consumidor elija mejillón gallego».
Razón por la cual sugiere «respetar el ciclo tradicional de cultivo, permitiendo que el producto alcance su estado óptimo antes de llevarlo al mercado».
Procede, por tanto, «un tiempo de reflexión que incumbe tanto a productores como a transformadores», considera.
Lina Solla: «No hay gestión, organización, ni competitividad»
Lina Solla, que en su día fue presidenta de la DOP, habla en representación de Angulas Aguinaga para lamentar que en el sector mejillonero «no hay organización, ni gestión, ni competitividad».
Se refiere así a «una producción atomizada que valora más las diferencias del pasado que los puntos en común».
A su juicio, «para escribir el futuro, el cambio principal pasa por la creación de una interprofesional de los que apuesten por Mexillón de Galicia que marque las directrices en todos los ámbitos: calidad, medio ambiente, investigación, comercialización y legislación».
Tito Fariña: «Otros abandonaron sus producciones»
También se pronuncia Tito Fariña, el presidente de la Asociación Gallega de Depuradores de Moluscos (Agade). Lo hace para aludir a «otros sectores del mar abandonaron sus producciones, con efectos contrarios a los del sector del mejillón».
Por contra, «el sector mejillonero tiene una enorme resiliencia y una absoluta disposición a mantener en valor una producción vital para la socioeconomía de Galicia, y a pesar de haber vivido en 2023 el año más crítico a nivel productivo de toda la historia, el tesón y esfuerzo de miles de hombres y mujeres lograron mantener una campaña tanto para fresco como para industria muy satisfactoria».
Esto lo lleva a decir que, si bien «el futuro es complejo e incierto, ante las variables climáticas y oceánicas, es indudable que estamos en buenas manos».
Alude así a un modelo de organización y gestión del sector mitilicultor que considera «totalmente sostenible». Incluso manifiesta que «los que formamos parte de las rías entendemos que es un ejemplo que satisface las necesidades del presente sin comprometer a las futuras generaciones, tanto en sostenibilidad social como económica y, por supuesto, ambiental».
Sabe, como todos, que el bateeiro es «un sector muy atomizado», pero también que funciona, y de ahí que cada vez más regiones costeras «quieran aprender de nuestro sistema productivo y replicarlo».
La mejora en las comunicaciones, envases y transporte termorregulado permite que actualmente nos encontremos con bivalvos de Canadá, Marruecos o Países Bajos perfectamente etiquetados en origen
En cuanto al modelo de comercialización, el presidente de Agade manifiesta que «el hecho de que la producción se venda en su totalidad o que domine el mercado, no significa que debamos dejar de reforzar nuestra presencia y calidad».
Muy por el contrario, «debemos producir el mejor producto y la comercialización debe diferenciarlo con el mecanismo que tiene a su servicio, como es el sello de calidad».
Otra llamativa reflexión de Fariña es la que dice que «la mejora en las comunicaciones, envases y transporte termorregulado permite que actualmente nos encontremos con bivalvos de Canadá, Marruecos o Países Bajos perfectamente etiquetados en origen, lo cual demuestra la importancia de mantener nuestros estándares de calidad y nuestra producción, atendiendo a los consumidores de manera más eficiente para evitar una pérdida de posicionamiento en los mercados estratégicos».
Pensando en el futuro, cree que «las oportunidades vendrán con una puesta en común de agrupaciones y asociaciones, aplicando tecnología para la obtención de cría y consiguiendo estirpes menos vulnerables a los posibles efectos de eventos climáticos adversos, así como aplicando nuevos métodos de cultivo en zonas con mayores aportes de fitoplancton».
Esto se logrará, cree Tito Fariña, «solo con acuerdos entre los propios productores y la administración».
Y termina diciendo que uno de los desafíos ante lo que está por venir es favorecer el relevo generacional y «disponer de personal técnicamente capacitado para garantizar que el mejillón siga creando riqueza y empleo, además de asentar población en la fachada costera gallega».
- El centollo cierra otro año de récord y pasa a ser especie acompañante
- Marisqueo en Arousa: no hay orilla que valga
- La Guardia Civil vincula un accidente de tráfico en Vilanova de Arousa con un posible ajuste de cuentas
- El marisqueo de Noia tiende a recuperarse, pero el de Arousa sigue hundido
- Los parquistas «aguantan el tipo» en Carril
- El anuncio de aranceles en EE UU llena de incertidumbre al sector vitivinícola
- Hospitalizados dos adultos y un niño tras un incendio en su casa en Vilanova
- Catoira clama por la finalización de la vieja concentración parcelaria