Centolo do Grove: más de 3.000 kilos y un tope de 28 euros

La flota destaca la «alta calidad» del crustáceo y confía en mejorar las capturas a medida que pasen los días

El buen tiempo, la luna llena y el viento del Norte lo dificultarán

Mariscos Gallego se hizo con el primer «mío»

Manuel Méndez

Manuel Méndez

O Grove

Como siempre, el balance del inicio de cualquier campaña pesquera va a depender de a quién se le pregunte. Con el centollo, que ayer volvió a las lonjas, no solo ocurre eso, sino que la satisfacción o el desánimo dependen del puerto, pues lo normal es que O Grove, el más importante de Galicia para la especie, ofrezca buenos resultados mientras los demás se lamentan.

De hecho, entre la flota de enmalle meca hay patrones que ayer regresaron a tierra a las diez de la mañana, porque ya habían obtenido el cupo establecido. Aunque otros tuvieron que permanecer en el mar hasta primera hora de la tarde para conseguirlo y algunos no lo lograron, aunque por poco.

"Esto es un oficio de pillos"

Los que mejor pescaron prefieren no contarlo, para que los demás barcos no acudan a la zona que ayer exploraron con éxito. «Esto es un oficio de pillos», reconocen.

Y los que pescaron poco asumen que quizás no acertaron con la zona e incluso lamentan haberse encontrado las redes (miños) destrozadas y con el «marisco roto» porque alguien largó nasas de nécora encima de su aparejo.

El centollo de O Grove vuelve a las plazas de abastos

Manuel Méndez

Ante tantas visiones diferentes de lo sucedido, lo que mandan son las cifras, y esta vez dicen que la primera subasta de la temporada en la «rula» meca llevó al mercado más de 3.000 kilos de Centolo do Grove –esa es la marca de calidad registrada en este puerto–, con un precio máximo de casi 28 euros y unos ingresos totales de casi 49.000 euros.

Fueron, concretamente, 27,6 euros (más IVA) por kilo los que marcaron la parada en el primer «mío», a cargo de la empresa Mariscos Gallego, que de este modo seleccionó 147 kilos. Los siguientes 65 salieron a casi 24 euros, les siguió un lote de 16 kilos, a 20, y después uno de 50 kilos, vendido a 17.

Y así fue bajando el precio a medida que avanzaba la subasta, hasta acabar en los 12 euros establecidos por la flota de enmalle grovense como cotización mínima o precio de retirada.

La campaña de 2002 había comenzado con unos 4.000 kilos de centollo, un precio máximo de 24,35 euros por kilo y uno mínimo, de 9, mientras que la del año pasado empezó con 3.800 kilos, un máximo de 25,65 y una cotización mínima de 10 euros el kilo.

Es decir, que los resultados en O Grove han sido francamente buenos ayer. Como en Cambados, que iniciaba la pasada campaña con 603 kilos y un precio máximo de 16, y que ayer se acercó en volumen y marcó un tope de 22 euros.

Expuestos los datos, hay que decir que las sensaciones no son malas, pues todos los pescadores consultados ayer coinciden al señalar que «los primeros días nunca son buenos», que «hay que dar aún con las zonas en las que se esconden los centollos» y que el viento del Norte, la luna llena que se avecina y el buen tiempo reducen las posibilidades de captura, ya que este crustáceo quiere frío y revoltura en el mar.

Así pues, la flota de enmalle seguirá buscando y probando suerte con sus aparejos alrededor de las bateas de la ría de Arousa y Sálvora y Corrubedo, con la esperanza de que la campaña pueda mantener su intensidad hasta las fiestas navideñas, que es cuando el «rey de los mariscos» alcanza sus mejores cotizaciones.

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