El aguacate quiere emular al kiwi en la huerta del albariño
La fruta tropical trata de abrirse camino entre los nuevos viñedos que afloran en la comarca

Aguacate recogido por los socios de la cooperativa Horsal. / Noé Parga

Plenamente consolidado como territorio vitivinícola, y convertido en una potencia indiscutible en esta materia en el seno de la Denominación de Origen Rías Baixas, la comarca de O Salnés y los municipios del Ullán no renuncian a seguir creciendo en esa misma dirección, y de ahí la gran cantidad de nuevos viñedos que se están plantando en la actualidad.
Pero los arousanos no parecen dispuestos a conformarse con el albariño, el tinto de Barrantes, caíño, godello, treixadura y demás variedades de uva.
Pimientos y kiwi
Y no se conforman porque saben de la enorme capacidad productiva de este territorio, de ahí que algunos lleven años diversificando los cultivos, hasta el extremo de situar a la comarca también en una posición privilegiada en lo que a especies como el kiwi o los pimientos tipo Padrón se refiere.
Dos buenos ejemplos a seguir para empresas como Horsal o Kiwi Atlántico y para no pocos productores que se están lanzando desde hace años a la conquista del territorio con las plantaciones de aguacate, en esta época del año inmerso en plena campaña recolectora.
Se complementa así el cultivo de oliva –con una importante plantación en Valga–, e incluso el de manzana para sidra, lúpulo, sorgo (maicillo), girasol para forraje, arándano, frambuesa y pistacho, entre otros productos que despiertan interés en Galicia; algunos en fase experimental en la comarca y otros ya descartados.

La manipulación del aguacate llevado por los socios de Horsal a su planta de distribución. / Noé Parga
“Estamos en una comarca con enorme potencial y un clima casi inmejorable, de ahí que los viñedos sigan creciendo y que algunos estemos apostando por productos ‘nuevos’ en Galicia como el aguacate”, explica Roberto Piñeiro Villanueva, responsable de una plantación de este fruto con 4 hectáreas de superficie que se sitúa entre Trabanca Badiña y Castroagudín (Vilagarcía).
1.800 árboles
Una finca en la que se han plantado alrededor de 1.800 árboles formando hileras, con un pasillo de separación de seis metros de ancho y una separación de 3,5 metros entre cada planta.
No estará plenamente consolidada hasta 2030, pero después de haber dado ya los primeros frutos –en una cantidad testimonial aunque de considerable calibre, con hasta 300 gramos por pieza–, todo parece indicar que generará aguacates de forma más llamativa dentro de tres años.
De ahí que esta parcela no figure entre las seleccionadas para la recolección que se lleva a cabo en la actualidad.

Una finca de aguacates en Vilagarcía. / M. Méndez
Una vendimia esperanzadora, ya que los primeros aguacates “tienen un tamaño más que aceptable y no sufrieron los efectos de la sequía, que sí dejó pequeña a buena parte de la producción del Sur”, reflexiona el propio Roberto Piñeiro, que esta misma semana recogerá aguacates en sus terrenos de Tremoedo (Vilanova de Arousa).
Cooperativa Horsal
Irán a parar a la cooperativa Horsal, de la que forma parte y que tiene a Fernando Veiga como gerente.
Este último confirma que la recolección del aguacate comenzó hace siete días y que se han detectado importantes y esperanzadores resultados en el proceso de calibrado de los frutos llevados ya a las instalaciones de Horsal, en Vilariño (Cambados).
Ese calibrado es el que permite medir y clasificar cada pieza, distribuyéndolas por calidades o categorías que, a la postre, van a determinar su precio final.
Más de 5 euros
A este respecto, puede decirse que con el calibre medio actual el aguacate de Horsal puede pagarse a los agricultores a, aproximadamente, 3 euros el kilo, para ser colocado en fruterías, supermercados y demás tiendas a 3,5 o 4 euros, lo cual supone que alcanzará un precio de venta al público de más de 5.
Se verá dentro de un par de semanas, ya que es el tiempo que el aguacate recogido ya debe permanecer en las instalaciones de Horsal, a la espera de que alcance el punto óptimo de maduración para proceder a colocarlo en la cadena de distribución.
Hace una década la Fundación Desarrollo Producto Ecolóxico de Galicia y la empresa El Nogal impulsaban en A Estrada una plantación ecológica y experimental de pistachos, avellanos y almendros.
Trataban de abrir camino a su producción industrial en la comunidad, y los primeros resultados fueron positivos. Así que algunos productores se plantearon la opción de introducir esos frutos en sus fincas de O Salnés.
A estas alturas puede decirse que es una alternativa que parece descartada, ya que su rentabilidad parece mínima. Así lo confirma Roberto Piñeiro, al que muchos conocen por sus plantaciones de aguacate y que sabe de esos intentos para introducir el pistacho en la comarca. “No parece viable, ya que hay demasiada humedad y el fruto se estropea”, sentencia.
Así lo destaca el propio Fernando Veiga, que insiste en que el balance de la primera semana de recogida es “muy positivo”, tanto por los buenos calibrados detectados como por la cantidad de producto suministrado por los asociados, pues “se está recogiendo incluso más de lo que esperábamos”.
Al dar estas explicaciones, el gerente de Horsal también confirma que actualmente esta entidad dispone de nueve socios con capacidad para suministrar producto, a los que se suman otros seis que tienen plantaciones ya activas de aguacate, aunque de momento son improductivas.
30 toneladas
La previsión es “obtener alrededor de 30 toneladas de aguacate, que es muy poca cosa, sobre todo si lo comparamos con las 400 toneladas que alcanzamos de pimiento tipo Padrón”, reconoce Veiga.
En cualquier caso, “es motivo de orgullo para nosotros, ya que se trata de los primeros pasos en la producción de aguacate, y los resultados que estamos obteniendo son esperanzadores”, asegura el representante de Horsal.
El mismo que muestra sus deseos de que el aguacate pueda seguir en la comarca los pasos firmes que ha dado ya la producción de kiwi, cuya recolección, iniciada en noviembre, ha terminado en su empresa hace solo unos días.
Lógicamente, no será hasta primavera cuando asomen las hojas y las flores. Pero, metafóricamente hablando, es ahora, en pleno invierno, cuando florecen infinidad de nuevas plantaciones.
Son terrenos aún en fase de explanación o desmonte, otros ya excavados, algunos con los primeros postes y otros, ya consolidados, con las plantas en su sitio.
Son, hay que insistir, nuevos cultivos de cepas, aguacates y kiwi que empiezan a poblar terrenos hasta ahora repletos de maleza, pinos o eucaliptos.
Ya se explicaba ayer en FARO DE VIGO que en los montes de Berdón (Vilagarcía) se han consolidado dos de las tres fases de implantación de viñedo proyectadas por la bodega Lagar da Condesa, del grupo Familia Gil.
Y se dijo, igualmente, que es solo un ejemplo, pues hay otros viñedos en fase de nacimiento en Meis, Vilanova, Ribadumia, Cambados y el Ullán.
“Nosotros recogemos poco, pues quien domina esta producción es Kiwi Atlántico, pero no cabe la menor duda de que es ya un fruto plenamente consolidado desde que se ha implantado en Galicia –hace medio siglo– y tiene una enorme demanda y proyección”.

Nuevas plantaciones en Zacande (Meis). / Noé Parga
Recuerda Fernando Veiga que antiguamente eran muchos los ciudadanos que plantaban kiwis y dejaban crecer las plantas sin control de ningún tipo.
Profesionalización
Pero destaca también que, de un tiempo a esta parte, se ha convertido en un cultivo absolutamente profesionalizado, en el que se aplican tratamientos fitosanitarios, se cuidan las podas, se estudian los suelos y, en definitiva, se actúa como en el profesionalizado sector vitivinícola, en este caso brindando todo tipo de mismo a las plantas de kiwi para lograr un rendimiento productivo y económico cada año mayor.
Pues eso, precisamente, es lo que buscan los productores de aguacate con este fruto tropical que parece encontrarse a gusto en Galicia y trata de abrirse camino entre viñedos.
La sociedad Kiwi Atlántico, constituida en 1988 por una treintena de kiwicultores de Galicia y Asturias –ahora son más de un centenar–, convoca para el día 31 una asamblea general ordinaria.
Va a desarrollarse en su sede social, sita en Lois (Ribadumia), con intención de examinar y aprobar, si procede, sus cuentas anuales.
Pero también para autorizar a la sociedad, presidida por Paulo Estévez Blanco, a realizar una adquisición de acciones propias.
En el orden del día de la sesión se incorpora la posibilidad de que los asistentes puedan realizar las preguntas e interpelaciones que consideren oportunas, además de proceder a renovar o modificar el consejo de administración.
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