Una mujer herida tras ser mordida por un perro sin correa

Los hechos ocurrieron al lado del instituto, en el centro de la ciudad

Uno de los perros vistos sin correa ni bozal en Vilagarcía.

Uno de los perros vistos sin correa ni bozal en Vilagarcía. / M. Méndez

M. Méndez

Una mujer resultó herida tras ser atacada por un perro que caminaba suelto por el centro de Vilagarcía, sin bozal ni correa.

El can estaba acompañado de su dueño, pero éste se desplazaba a varios metros de distancia, por lo que nada pudo hacer para evitar el ataque.

Gritos de dolor

Los gritos de dolor de la víctima, tras ser mordida en una pierna, desataron la lógica alarma entre los viandantes, que no podían dar crédito a lo sucedido.

Tampoco los que presenciaron la escena, quienes aseguran que el animal, que no es de raza peligrosa, la atacó sin motivo aparente.

Sucedió a la una y media de la tarde de ayer en las inmediaciones del Instituto Castro Alobre, justo antes de que los alumnos salieran de clase. Los vecinos llevan tiempo denunciando la presencia de perros sueltos en la ciudad.

Ya se explicó el pasado mes de agosto que la presencia de perros sueltos en las calles de Vilagarcía se está convirtiendo en un problema para muchos, a juzgar por la sucesión de críticas y quejas realizadas por los vecinos.

Un perro suelto en Vilagarcía.

Un perro suelto en Vilagarcía. / M.M.

Cada vez son más los que alertan de tal situación y explican que tanto si van con sus dueños como si vagan en solitario por el centro urbano, “estos animales pueden convertirse en un auténtico peligro”.

Lo cierto es que casi a diario pueden verse canes de raza potencialmente peligrosa sin correa y sin bozal correteando por zonas peatonales de Vilagarcía.

También se ven perros, tanto de pequeño tamaño como grandes, cruzando calles transitadas sin ningún tipo de control.

Los denunciantes de estos episodios dicen estar cansados de presenciarlos y temen que sus hijos e incluso sus propios perros, a los que sí llevan atados, puedan ser atacados.

De ahí que reclamaran en repetidas ocasiones mayor control policial y alerten también de la presencia de “demasiados excrementos caninos que la gente no recoge y quedan esparcidos” por las calles de la ciudad.

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