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Un manto de marisco muerto en la ría

“Contra la naturaleza no se puede luchar”, claman los mariscadores

Manuel Méndez

Manuel Méndez

Arousa

Es pronto para evaluar las pérdidas reales, ya que habrá que esperar unos días a que se recuperen los parámetros normales de salinidad antes de levantar el marisco sin miedo a matarlo para así determinar el estado real de los diferentes bancos.

Pero, a priori, las pérdidas en el sector marisquero de la ría de Arousa y de otros puntos de Galicia se antojan notables.

Un hombre recogiendo concha.

Un hombre recogiendo concha. / M. Méndez

Y todo, como queda dicho y se explicó también en días pasados, a causa de un brutal descenso de la salinidad provocado por las insistentes lluvias del tren de borrascas pasadas.

Agua dulce

El resultado salta a la vista: en esta época del año el agua debería estar a unas 33 partes por mil, lo que significa que por cada kilogramo de agua hay 33 gramos de sales disueltas.

Y, sin embargo, en los últimos días estuvo en 0 en zonas como Carril, lo cual significa que los bivalvos estuvieron metidos de lleno en zona de agua dulce.

Agonizando en la arena

Y esto hizo que el marisco se desenterrara y acabara agonizando sobre la arena, de ahí las ingentes cantidades de concha de almeja y berberecho que cubren el litoral arousano.

También en los afamados parques de cultivo de Carril, ayer cubiertos de un manto de concha procedentes de los propios viveros y arrastrada por las corrientes desde el río Ulla y otros puntos de la ría arousana.

Imagen desoladora

El aspecto que presentaban estos parques era desolador, observándose una llamativa presencia de acuicultores sacando concha muerta, para evitar que acabara asfixiando al marisco que sigue vivo y enterrado.

Trabajadores en los parques de cultivo, ayer.

Trabajadores en los parques de cultivo, ayer. / M. Méndez

Como también tratando de aprovechar el poco que se haya salvado no para resembrarlo, ya que “sería contraproducente, dado lo débil que está”, sino para venderlo de inmediato.

“Contra la naturaleza no se puede luchar; no podemos evitar que el agua dulce llegue a nuestros parques, y cuando lo hace como esta vez es terrible y solo nos queda lamentarnos y retirar lo que está muerto para volver a empezar”, explicaban ayer los propios parquistas.

La OPP-89

Integrantes de una entidad, cabe recordar, que es una de las más claras referencias de la producción de bivalvos en Galicia, como lo atestigua el hecho de que en lo que va de año facturara ya en lonja más de 8 millones de euros, mejorando el registro histórico de todo 2022.

Bivalvo muerto amontonado en Carril, ayer.

Bivalvo muerto amontonado en Carril, ayer. / M. Méndez

Una Organización de Productores (OPP-89) capaz de generar 113 millones de euros en la “rula” carrilexa durante las dos últimas décadas que ha proyectado la marca Ameixa de Carril a nivel internacional y ahora está expectante ante las consecuencias que pueda tener el descenso de la salinidad.

Su presidente, José Luis Villanueva Vicente, insiste en que “antes de evaluar la mortandad real hay que esperar unos días para ver cómo evoluciona el marisco que sigue vivo” y el que pueda estar agonizante.

Estabilidad

“Cuando se estabilicen los valores del agua será el momento de sacar conclusiones y ver qué se puede recuperar o cuánto marisco ha muerto –reflexiona–, pero andar levantándolo ahora es peligroso, ya que está tan débil que no se volverá a enterrar”.

Abundando en ello, destaca el intenso trabajo realizado ayer por los parquistas en los viveros de la zona de O Bao, la más sensible a las riadas.

Circunstancia que aprovecha para contrastar el "trabajo profesional" de la OPP-89 con “la poca profesionalidad” de la agrupación de marisqueo a pie, “pues cuando no están en un cese de actividad subvencionado están de baja laboral, ya que lo único que persiguen es cobrar sin trabajar”.

Subieron el cupo

En relación con esto, Villanueva pone como ejemplo de esa “nula profesionalidad” que “estos días denuncian una mortandad masiva de su almeja, y sin embargo decidieron subir el cupo hasta el máximo de 15 kilos por persona, cuando lo lógico sería reducir el que tenían, como hacen otras cofradías”.

Los parques de cultivo carrilexos.

Los parques de cultivo carrilexos. / M. Méndez

Considera que es una decisión que “nadie se puede explicar”, lamenta que la Consellería do Mar “se lo consienta” y sentencia que “viniendo como vienen de un cese de actividad, subir ahora los cupos no es sensato, pues lo único que van a lograr es causar un daño irreparable a sus bancos”.

Lo que quiere decir es que si intensifican el trabajo y levantan el berberecho o la almeja juveniles ahora que están tan débiles, "acabarán matándolo todo; lo normal sería esperar a que los valores normales del agua se recuperaran en lugar de actuar de nuevo de manera imprudente”.

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