La venta de almeja se desploma a la mitad en un lustro en las cofradías del sur de la ría

Solo la lonja de Carril tiene mejores registros en lo que va de año que en los ejercicios precedentes | La facturación cae solo un 25% gracias al incremento de los precios medios | Los pósitos se reúnen hoy con la Consellería do Mar

Imagen de archivo de una subasta de almeja en la lonja de Carril. |  // IÑAKI ABELLA

Imagen de archivo de una subasta de almeja en la lonja de Carril. | // IÑAKI ABELLA / Anxo Martínez

Las distintas variedades de almeja son el principal sustento económico para miles de mariscadores de a pie y a flote en la ría de Arousa. Pero es un recurso que está pasando por un mal momento. Así lo revelan las estadísticas oficiales de la Consellería do Mar. Según el portal Pesca de Galicia, la venta de los distintos tipos de almeja ha caído a la mitad en el último lustro en la práctica totalidad de las lonjas del sur de la ría de Arousa. Únicamente en la de Carril se mejoran los registros de este ejercicio con respecto a los precedentes.

En el sector achacan esta merma de la producción a una confluencia de factores, entre los que se encuentra la mortandad de gran parte de la cría, lo que dificulta la regeneración natural de los bancos. Un ejemplo paradigmático de ello son las zonas de libre marisqueo, donde hay tan poco marisco que las cofradías arousanas han decidido solicitar a la Xunta de Galicia el cierre prematuro de la campaña. Hoy, precisamente, los pósitos se reúnen con el director xeral de Pesca, Antonio Basanta, para exponerle esta solicitud.

Los datos

En la lonja de Vilanova, por ejemplo, entre el 1 de enero y el 30 de septiembre de este año subastaron 108.500 kilos de almejas (babosa, fina o japónica, principalmente), frente a los casi 239.000 kilos del mismo periodo de 2018. Es igualmente notable la caída de producción en la rula de A Illa. En los nueve primeros meses del año 2018, se vendieron en esta localidad 290.000 kilos de almejas, mientras que en el mismo periodo del presente ejercicio solo van 113.400.

Vilanova y A Illa son las cofradías que soportan los descensos de producción más acusados, pero también se producen, en menor medida, en Cambados, O Grove y Vilaxoán. Esta situación está provocando una importante merma en la facturación de las lonjas. Sin embargo, en este caso, el descenso es menor porcentualmente gracias a que en las lonjas se ha revalorizado mucho el marisco. Así, la facturación ha disminuido solo el 25 por ciento, frente al 50 por ciento que cayó la producción.

Por citar unos ejemplos, el precio medio de todas las variedades de almejas en Cambados fue en 2018 de 13,66 euros, mientras que en lo que va de 2023 ha subido hasta los 20,46 euros. A Illa, por su parte, se ha pasado de los 12,76 euros el kilo de media en 2018 a los 19,66 del presente ejercicio. Esta situación permite a los mariscadores sobrellevar la situación, pero con la lógica preocupación de temer que esta situación no sea sostenible durante mucho tiempo.

La lonja de Carril es una excepción en esta tónica, pues según las estadísticas de Pesca de Galicia sus registros de este 2023 son los mejores de la última década. En los nueve primeros meses de este ejercicio se vendieron en la rula del norte de Vilagarcía 609.000 kilos de almejas, frente a los 461.000 del mismo periodo en 2022, los 530.000 de 2020, los 460.700 de 2019, o los 403.500 de hace un lustro. Además, la estadística de Pesca de Galicia indica que hay teniendo más marisco lo están vendiendo mejor este año, pues el precio medio en 2018 era de 10,67 euros el kilo, y en lo que va de año ha subido a 12,48. En Carril se vende el marisco tanto de las concesiones propias como de los parquistas.

El berberecho

No ayuda en el actual contexto la situación del berberecho, que en el conjunto de Galicia presenta también unos guarismos muy inferiores a los de los últimos años, si bien en este caso es debido sobre todo al cierre de los bancos de Noia debido a las riadas de 2022.

En los nueve primeros meses de este año se vendieron en las rulas gallegas 420.000 kilos de berberecho, la cifra más baja de los últimos cinco años, y que está muy lejos del millón de kilos de 2018. El año pasado también se superó el millón de kilos, y en 2019 fueron casi millón y medio.

Sin embargo, la tónica es similar en buena parte de las rulas arousanas. En Cambados se subastaron en nueve meses 17.400 kilos de este bivalvo, frente a los más de 32.000 de hace un año. En A Illa, los poco más de 2.000 de este ejercicio son casi un tercio de los de 2022.

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La denominación de origen Mexillón de Galicia ha dado “un salto de gigante en su promoción”, en palabras de la entidad, con la emisión hasta el 12 de noviembre de un anucio publicitario en algunas de las cadenas de televisión con más audiencia de España, como Antena 3, la Sexta, Neox, Paramount o Discovery Max. Se trata de un anuncio elaborado conjuntamente con la denominación de origen protegida (DOP) Cava en la que se propone el maridaje entre los dos productos: el mejillón gallego y el vino catalán. El trabajo publicitario está protagonizado por el cocinero gallego Pepe Solla (que tiene una estrella Michelin) y la sumiller María José Huertas, que ya participaron el pasado mes de junio en la presentación de esta campaña conjunta en Madrid. Ambos dialogan sobre cómo maridar mejillón y cava, con escenas grabadas en los paisajes en los que se producen ambos alimentos, las bateas de las rías gallegas y los viñedos de Cataluña. En una segunda pieza, Solla dialoga con un frailecillo y le explica cómo distinguir un mejillón con DOP, “superior y exquisito”, de otro que no lo es.

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