Revólver y la Feria Celta llenan de ambiente la ciudad en Santa Rita

El ambiente de romería urbana se consiguió en este largo fin de semana que vive la ciudad de Vilagarcía al conmemorarse mañana lunes el día de Santa Rita de Cassia, patrona de los imposibles y que cuenta con miles de devotos procedentes de toda la provincia.

Aunque las fiestas tienen como principal rasgo el religioso, el Ayuntamiento ha conquistado también a la población civil con la Feria Celta que reúne a todo tipo de artesanos en A Xunqueira.

Tras su apertura a las once de la mañana, una multitud llenó el recinto festivo en el que además de puestos de marroquinería, ropa, perfumes, alimentos, artesanía, cerámica y otras actividades también se disfrutaron de juegos populares y espectáculos en vivo, muchos protagonizados por niños que simulaban batallas con espadas de madera y que estaban a la venta en los quioscos abiertos.

También llamó la atención el espectacular carro del país que recorrió el recinto arrastrado por dos fornidos jóvenes y que fue especialmente admirado por jóvenes y mayores que no se han querido perder un escenario histórico que ha vuelto a recuperar su esplendor prepandémico.

Toda una jornada que tuvo como colofón una boda con el ritual celta que entusiasmó a todos los asistentes que la presenciaron a las diez de la noche,

Las fiestas de Santa Rita tuvieron una hora más tarde el acto más multitudinario con la celebración del concierto de Revólver, liderado por Carlos Goñi quien después de veinte discos publicados y una trayectoria que arrancó en 1989 presentó en Vilagarcía su último trabajo dentro de la gira “Adictos a Euforia”, con el que invitó al público a ver la vida desde otra perspectiva.

Además del concierto y la feria, la jornada comenzó a las 10.00 horas con un partido de rugby-7 en el estadio municipal, todo un día aderezado con la actuación de los grupos Trasnos de Guillán y A Mocidade da Torre 83 que intercalaban sus actuaciones por la mañana y de tarde, consiguiendo una velada animada, en la que no podía faltar el pulpo.

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