La "loca" carrera de camas de Meaño vuelve por la Inmaculada

La prueba tuvo siempre una enorme aceptación de público por su histrionismo / Se contará con ocho artefactos en la salida

Uno de los grupos participantes en una anterior edición de las carreras de camas. |   // FARO

Uno de los grupos participantes en una anterior edición de las carreras de camas. | // FARO / Tino Hermida

Tino Hermida

Meaño recuperará este año su mítica “carreira de camas sobre rodas”, que se había organizado durante 16 años hasta 2009 (el último) por la asociación cultural y deportiva G.A.M. y que fuera uno de los referentes del año en atracción de público en la localidad, no en vano la cita había atraído hasta 3.000 personas en sus mejores ediciones.

Esta recuperación se hace posible en esta ocasión de manos de la comisión de fiestas que rescata el evento para sus fiestas de la Inmaculada. Se disputará así el 7 de mayo al filo de las 19 horas, y contará en esta edición con ocho camas rodantes, que es el máximo fijado por la organización y cuyo tope se completó en apenas una semana de plazo.

Prueba extravagante

Fue en 1994 cuando nació la “carreira de camas sobre rodas, una prueba entre cómica y extravagante que rompió todas las previsiones de aceptación y público, y que desbordó el circuito ya en su primera edición. Se organizaba desde entonces cada segundo domingo de septiembre, haciéndola coincidir con las fiestas patronales de los Milagros.

La carrera volverá a disputarse sobre un circuito habilitado para la ocasión en pleno centro de la localidad, en torno a la praza do Concello. Con el mismo espíritu que entonces, será una competición festiva y no competitiva, donde los ganadores únicamente se llevarán la “honrilla” de la victoria, siendo obsequiados luego todos los participantes con un regalo conmemorativo. Sobre el podio al más puro estilo de la Fórmula-1, subirán los que resulten tres primeros clasificados.

Pijamas y sábanas

Cada cama deberá llegar equipada con su sistema de ruedas y frenado, ingenio que queda en manos de cada una de las peculiares escuderías participantes, y que, antes, deberán someterse a superar la particular ITV de los jueces del comité organizador. Añadido, cada cama deberá competir ataviada con su ropa habitual: sábanas, manta, almohada y colcha o edredón. Cada equipo estará integrado por dos pilotos, los cuales deberán competir en indumentaria para dormir, ataviados, pues, con pijama, camisón o similar.

Un peculiar mono de piloto que deberá complementar cada uno con casco en la cabeza por seguridad de los participantes.

Vertiginosas bajadas

En el circuito, las camas rodantes tirarán de las bajadas para rodar cada cual libre por su inercia, mientras que en las cuestas arriba deberán hacerlas subir “a pan de millo”, esto es, empujando o tirando cada pareja de pilotos de su respectiva estructura.

El peso de la cama resulta, a la postre, un condicionante a tener en cuenta por cada equipo a la hora de diseñar su cama rodante y probar los bólidos en sus túneles de viento: todo lo que aporte el peso en la bajada para adquirir mayor velocidad, le lastrará en la subida, al tener que empujar otra tanta distancia por su vehículo.

Estrategias

Bien lo saben, aquellos que participaron en ediciones precedentes: esta carrera de camas se gana más en las subidas que en las bajadas, un paralelismo que les acerca más al ciclismo que al mundillo del motor.

Para tal fin la comisión de fiestas de Meaño, integrada por media docena de entusiastas mujeres, que irrumpieron el pasado año presididas por Marta Aragunde, celebraron ayer en la praza do Concello la Fiesta de la Primavera, una sesión discoteca al aire libre amenizada por los djs Paco Vulcano y Bruno Canario.

La sesión comenzó a las 22.30 horas con entrada libre y que, amén de música y servicio de bar, contó con sorteos y algunas sorpresas añadidas dispuestas por la organización.

El objetivo era recaudar fondos para hacer posible la organización de la “carreira de camas sobre rodas” y afrontar la verbena del día grande de la Inmaculada que será el 7 de mayo.

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