Aprender a reciclar a través de la tecnología es posible

Mariña Nogueira, Virginia Cespón, Carla del Río y Antía Fernández son cuatro jóvenes vilagarcianas de 14 años a las que su gusto por la tecnología les ha llevado a participar en un concurso a nivel mundial de nombre Technovation Girls.

El propósito de esta iniciativa no es otro que fomentar la participación y el empoderamiento femenino también en el sector tecnológico. Con el apoyo de mentores y padres voluntarios, las niñas trabajan en equipos para codificar aplicaciones móviles que aborden problemas del mundo real.

El conocimiento de esta promoción surgió casi de casualidad. La madre de una de las chicas tuvo conocimiento de Technovation Girls a través de una amiga. A ello se le sumaba la constancia evidente de que a su hija le apasiona la tecnología y todo lo relacionado con su desarrollo. A partir de ahí la energía y la implicación hizo el resto hasta involucrase de pleno en el fin.

La temática elegida para desarrollar su aplicación ha sido la del reciclaje. Mariña Nogueira reconoce que “manejamos varias opciones. Al final nos quedamos con dos finalistas como eran el reciclaje y el abuso. Nos decidimos por la primera porque entendemos que es algo en lo que hay mucha desinformación”.

BeClean es el nombre elegido

Además de crear el logo, también encontraron el nombre ideal para plasmar su propósito y ese no fue otro que BeClean. Su desarrollo, todavía en fase de experimentación, se basa en criterios de atractivo para los jóvenes, pero también de un uso absolutamente intuitivo y basado en juegos para descubrir la perfecta utilización del reciclaje y sus utilidades.

Las cuatro alumnas del IES Castro Alobre tienen a su disposición una mentora con la que conectan cada sábado un par de horas por vídeoconferencia para tratar diferentes cuestiones que vayan surgiendo al respecto de la aplicación. “Siempre hay dudas que surgen y matizamos siempre desde el punto de vista técnico que nosotras no tenemos”, señala Mariña Nogueira. Incluso a lo largo de la semana, la propia organización ofrece la posibilidad de participar en cursos que facilitan todo lo relativo al desarrollo de la aplicación.

El próximo 18 de abril es la fecha límite para la presentación del trabajo y a finales de mes acudirán a Madrid para exponer ante los jueces la defensa de la aplicación. Previamente también hay que enviar vídeos explicativos del desarrollo de su trabajo que deben ir en inglés para fomentar el avance de las estudiantes en otros ámbitos, como en este caso el del idioma extranjero.

Será el próximo mes de julio cuando se publicarán los resultados de la competencia reconociendo a 15 equipos finalistas y 15 ganadores regionales. Los equipos podrán acceder a sus puntuaciones y certificados en este momento.

El premio final está en Estados Unidos

Más allá de la fase nacional, el recorrido de los mejores proyectos va mucho más allá. Y es que a los que suceda en España le seguirá un filtro europeo y uno posterior, de carácter mundial, que tendrá lugar en Estados Unidos, concretamente en la ciudad de San Francisco.

Al margen del sueño de poder llevar su BeClean a las más altas cotas, Mariña Nogueira, Virginia Cespón, Carla del Río y Antía Fernández se centran en seguir afinando su aplicación para ser lo más competitivas posibles en su división júnior. Cabe señalar que las tres categorías establecidas por Technovation Girls se distribuyen en edades. Otro requisito es que todas las participantes tengan una edad comprendida entre los 8 y los 18 años.

En el caso de las jóvenes vilagarcianas, estudiantes de 3º de ESO, el consenso es su condición innegociable en cada pequeño paso en el que se avanza. Desde la elección de los colores o lo relativo a los juegos a introducir para dar a conocer el concepto del reciclaje con el reto y la competitividad como gasolina para la participación en la aplicación.

Al margen de lo que suceda en relación al criterio de los jueces, ya nada las podrá privar de participar en un concurso de tanta jerarquía y medir su afición por las nuevas tecnologías con un propósito tan honorable como el cuidado del medio ambiente. Y todo ello, compatibilizando el desarrollo de BeClean con sus estudios y sus otras pasiones como el baloncesto y la música.

De momento, todavía quedan las últimas implementaciones para que su obra quede lo más completa posible, aunque su sentido crítico siempre lleve a pensar en que todavía queda alguna cosa más que desarrollar en una visión del reciclaje desde una perspectiva de lo más juvenil.

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