El I+D+i del narcotráfico

El uso de batiscafos, sumergibles o embarcaciones de porte similar es un método que las mafias llevan mucho tiempo utilizando en América, pero que en las Rías Baixas todavía se encuentra en fase de experimentación, ya que supone atravesar todo el Atlántico, bien sea navegando en solitario, bien a bordo de una nave nodriza que lo soltaría a una determinada distancia de tierra. Esas prácticas se han ido documentando por parte de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en Galicia, aunque pocas veces se ha podido localizar una embarcación de estas características, siendo sus hallazgos bastante limitados por el momento, ya que las mafias gallegas apuestan más por las embarcaciones semirrígidas y su velocidad y potencia para alcanzar las playas de descarga.

De todas formas, para tener noticias del primer hallazgo de estas características habría que remontarse al 13 de agosto de 2006, entre la playa de Liméns, en Cangas, y las islas Cíes. Ese batiscafo había sido construido en la ría de Vigo y había salido a la búsqueda de la nave nodriza para recoger la cocaína. Sin embargo, el piloto no se fiaba de la seguridad y obligó a la organización a abandonar el sumergible, que acabaría siendo localizado por la policía. Aquella aventura acabaría con seis detenidos que acabarían siendo condenados a tres años y nueve meses de prisión.

Las noticias de narcosubmarinos en Galicia no volverían a aparecer hasta la madrugada del 24 de noviembre de 2019, cuando se localizó uno en la ría de Aldán. La embarcación, en la que viajaban tres individuos, dos colombianos y un gallego, venía siendo monitorizada prácticamente desde su salida desde Brasil. Después llegaron los 27 días de travesía por el Atlántico, sorteando temporales y cambiando a última hora de destino debido a los problemas en el motor de una lancha. La odisea que protagonizaron estos tres individuos, que encontrarían respaldo en otras cuatro personas en tierra acabaría con una condena de 13 años y medio y sirviendo de inspiración a una serie “Operación Marea Negra”, que ya va por su segunda temporada.

Menos de un año después de localizarse el submarino en Aldán, la Guardia Civil sorprendía a tres individuos tratando de remolcar una narcolancha, de construcción muy similar a un batiscafo, en pleno puerto de Vilanova. Todo ocurrió de madrugada, cuando medio casco urbano de Vilanova se despertó por el “barullo” que se registraba en el puerto, donde tres individuos trataban de subir a un remolque una embarcación mucho más grande. Los vecinos alertaron a la Guardia Civil, que contaba con una patrulla en las inmediaciones, que dio con los individuos. A uno, un vecino de Vilanova, lo apresaron a escasos metros del barco, mientras el segundo se lanzó al agua y fue rescatado horas después en una batea por la embarcación de la Guardia Civil. El tercero consiguió huir. Los tres ya habían intentado unas horas antes sacar del agua la embarcación en otro punto de la costa vilanovesa, pero no lo consiguieron, por lo que no se les ocurrió mejor idea que intentar subirla en pleno casco urbano.

La batalla contra las narcolanchas se cobra dos detenidos en Vilanova y A Illa

En la comarca también se ha llegado a localizar una nave con un zulo dedicado a probar la navegabilidad de las lanchas que se utilizan para alijar toneladas de cocaína en las costas de Galicia. Fue en el polígono de Tremoedo en abril de 2022.

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