El pasado 15 de noviembre, la cúpula del Partido Popular en Pontevedra, en manos de Luis López, presentaba oficialmente en O Grove a Pablo José Leiva como nuevo líder de la formación y candidato a la Alcaldía en las elecciones de mayo.
De este modo se cerraba la opción de Diego Portela, que estaba llamado a ser la gran esperanza para la recuperación del maltrecho PP meco, y se descartaban opciones como la de Daniel Sineiro y el sempiterno aspirante, Fernando Meis.
¿Nueva etapa?
Aquella presentación ante la ejecutiva local marcaba el inicio de una nueva etapa en la que, como se decía entonces, el abogado Pablo Leiva estaba obligado a conseguir que el PP intente cerrar filas nuevamente.
Y ya se advertía de que los populares tendrían que ponerse a trabajar de inmediato si querían llegar a tiempo y con garantías a la cita con las urnas.
Pues bien, dos meses después, nada se sabe de Leiva ni de su equipo. Y dado que no hace movimiento alguno para darse a conocer, ni parece tener voluntad de presentar su proyecto –FARO DE VIGO le pidió sin éxito que lo expusiera justo después de ser designado–, ahora empiezan a retorcerse algunos militantes conservadores y barones de este partido, en el que parece empezar a existir cierto desánimo o conformismo.
¿Quién manda?
Y es que creen que el tiempo apremia, por lo que se preguntan “dónde están ahora los que mandan” o, lo que es más preocupante, “quién manda ahora en nuestro partido”.
Hay incluso quien sospecha que Leiva podría tener dificultades para completar la lista electoral conservadora.
Algo que parece suceder también en otros municipios costeros en los que existe una estrecha vinculación con el sector bateeiro, pues ya se sabe que las relaciones entre los mejilloneros y el PP no atraviesan ahora su mejor momento, a causa del conflicto de la mejilla.
Hay candidatos que dicen "no"
Lo cual estaría haciendo que potenciales candidatos ligados a la acuicultura digan “no” al partido de la gaviota, que es algo que ya hicieron varios conocidos productores de mejillón tanto en O Grove como en otras localidades arousanas.
Unas dudas que en el caso del PP de O Grove explicarían, a juicio de algunos barones, que Leiva ni siquiera se dejara ver en la pasada fiesta del patrón de San Vicente.
Cita social y religiosa importante
Una cita social que los partidos suelen tomarse muy en serio, dado el peso que tiene el electorado de esta parroquia, sobre todo la celebración tiene lugar a solo cuatro meses de la cita con las urnas.
Lo cierto es que según los militantes consultados, en actos como el "aperitivo con el cura" no estaban ni Pablo Leiva ni ninguno de los tres concejales actuales del PP.
Ahora es mejor dejar estar las cosas como están porque ya no queda tiempo para más cambios; pero quizás haya que empezar a pensar en planificar con garantías las elecciones de 2027
Su antecesora como alcaldable, Beatriz Castro, parece tener disculpa, ya que se encuentra de viaje.
Pero se desconoce si tienen justificación para no haber estado los otros dos ediles, Víctor Otero Prol y Martín Rivera, quienes parecen estar escribiendo los últimos renglones de su libro político.
El segundo asegura haber estado, aunque nadie parezca haberlo visto o reconocido, quizás debido a su escasa presencia pública en lo que va de mandato.
Una celebración esa de San Vicente, por cierto, en la que un histórico del PP como el exconcejal Fernando Meis era prácticamente el único representante de peso de su partido, aunque fuera a título particular.
Al igual que estaba, como podía ser menos, ya que se trata del presidente de la comunidad de montes de San Vicente, el exconcejal independiente Manuel Castro (“Manolo o do leite”), padre de Beatriz Castro.
El PSOE sí estuvo
Nada que ver con lo del PSOE, que desembarcó en la celebración socio-religiosa con su alcalde y alcaldable, José Antonio Cacabelos Rico, a la cabeza.
Arropado para la ocasión por ediles como Ángeles Domínguez, Juan Ramón Outeda, Santiago Meis y Juan Otero, este último responsable de la concejalía del Rural, que los socialistas decidieron crear para, precisamente, prestar una atención especial a esta parroquia.
Lo dicho, que Pablo Leiva no estaba, “y nos preguntamos a qué espera para empezar a aparecer en los medios de comunicación y dejarse ver en los actos públicos que se llevan a cabo, ya que estamos a menos de cuatro meses de las elecciones y habrá que hacer algo para llegar a los votantes”, sentencian los barones del partido.
Los mismos que, precisamente a causa del poco tiempo que resta hasta los comicios, creen que “ahora es mejor dejar estar las cosas como están porque ya no queda tiempo para más cambios; pero quizás haya que empezar a pensar en planificar con garantías las elecciones de 2027”.