Los estudiantes reclaman más facilidades para estudiar en las bibliotecas de O Salnés

Los centros de lectura arousanos no amplían horarios en las vísperas de los exámenes

Imagen de archivo de estudiantes trabajando en la biblioteca municipal de Vilagarcía. |   // IÑAKI ABELLA

Imagen de archivo de estudiantes trabajando en la biblioteca municipal de Vilagarcía. | // IÑAKI ABELLA / Anxo Martínez

En las ciudades universitarias es habitual que las bibliotecas extiendan sus horarios en determinados momentos del año, sobre todo cuando se celebran las evaluaciones de fin de cuatrimestre. Así, las salas de lectura permanecen abiertas hasta altas horas de la madrugada, y también prestan servicio los fines de semana.

En más de una ocasión los estudiantes han reclamado seguir este modelo en las bibliotecas municipales, para poder seguir trabajando durante las vacaciones de Navidad o los fines de semana, pero la realidad es que en O Salnés únicamente la Luís Rei de Cambados abrió dos tardes a mayores.

Todos los concellos arousanos disponen de bibliotecas públicas, pero solo la de Cambados adaptó ligeramente sus horarios durante este mes de enero, cuando se examinan miles de universitarios.

Todas las demás mantuvieron sus horarios habituales. En muchos casos, funcionan solo de lunes a viernes.

También se quejan de que el Espazo Xove de San Roque permanece cerrado los fines de semana

En enero de 2019, un grupo de jóvenes organizó una vistosa protesta en plena calle Alcalde Rey Daviña, a las puertas de la biblioteca municipal de Vilagarcía. Sacaron las mesas y los libros a la calle y se pusieron a estudiar al aire libre. La acción aunó a varios colectivos, y pretendía llamar la atención sobre la falta de espacios adecuados para que los estudiantes puedan trabajar.

Andrea Obenza, que participó activamente en la movilización, afirma que se lograron algunas mejoras y celebra que la biblioteca tenga ahora horario continuo de 9.00 a 21.00 horas, pero echa de menos más facilidades para estudiar los fines de semana. “Estaría bien que la biblioteca tuviese un horario extraordinario en determinados momentos del curso”, sostiene. En este sentido, aboga por ofrecer el servicio los fines de semana, que es cuando muchos jóvenes regresan a sus domicilios.

Borja Santamaría, presidente de Arouza Moza, también participó en la protesta de 2019. Considera que, “no tiene ningún sentido que las salas de estudio cierren precisamente los días que podrían ir los estudiantes”. Y hace extensiva su crítica al Espazo Xove, que la Xunta de Galicia tiene en Vilagarcía, en la confluencia de San Roque con Juan Carlos I. “Abre de lunes a viernes, de modo que cierra justo los días en que están libres los jóvenes”.

Posibles mejoras

Santamaría plantea que con una adecuada planificación se podría ofrecer el servicio, “porque hay otras bibliotecas y agencias de lectura que están cerradas”, y se queja de que el Concello prohíbe ahora a los estudiantes quedar en la planta baja del Auditorio, un lugar al que acudían mucho en el pasado para hacer trabajos en grupo. Por ello, insta al gobierno municipal a pensar en las necesidades de los estudiantes a la hora de diseñar y ordenar los espacios en la nueva biblioteca, que se está construyendo en la calle de Castelao.

Sobre esto, Andrea Obenza sugiere la creación de espacios más aislados del ruido y el tránsito de personas, para poder concentrarse en el trabajo, una iluminación adecuada para la lectura, y que haya aseos en cada planta.

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La única biblioteca de O Salnés que introdujo este mes alguna modificación en su dinámica habitual para satisfacer la demanda de los universitarios fue la de Cambados, ya que abrió los sábados 7 y 14 de enero por las tardes. El concejal de Cultura, Constantino Cordal, indica que pasado mañana, 21 de enero, no repertirán porque ya quedan pocos exámenes. La mayoría de universitarios finalizarán sus pruebas el jueves 26. En Vilagarcía, la biblioteca principal, que es la Rosalía de Castro (la situada en la calle Alcalde Rey Daviña) funciona de lunes a viernes, de 9.00 a 21.00 horas, de manera ininterrumpida, y los sábados de 9.00 a 14.00 horas. Durante la Navidad se mantuvo el horario.

En Sanxenxo, disponen de tres centros de lectura, y el de Vilalonga sí recibe a un gran número de jóvenes. No está concebida de forma específica para estudiantes, pero son muchos los que acuden a esta biblioteca por su horario, de 16.00 a 21.00 horas. En O Grove mantienen los horarios habituales de trabajo. Hace años sí se probó a habilitar otras franjas de atención al público, pero la respuesta de usuarios fue pobre y el Ayuntamiento desistió de repetir esta experiencia.

En Ribadumia, la biblioteca sí ha reservado un espacio propio para quienes necesitan más silencio para trabajar -estudiantes de cualquier ciclo, opositores...- y está abierta de 15.00 a 21.00 horas, de lunes a viernes. A menudo, las bibliotecas desempeñan varios roles: son lugares a los que se va a leer periódicos o revistas; otros van por el servicio de préstamo de libros; también se organizan actividades culturales o educativas para niños y de animación a la lectura. En consecuencia, no siempre es posible disfrutar del silencio riguroso que necesitan los estudiantes para trabajar, y mucho menos en los municipios pequeños.

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