Un peligroso socavón alerta a los usuarios de la ruta del Umia

José Ramón Abal, concejal de Cambados Pode, denunció ayer el estado de algunos elementos del mobiliario urbano de la ruta de senderismo del río Umia correspondientes al concello cambadés. Abal afirmó que hay un puente de madera con las tablas prácticamente podridas, y que las lluvias de las últimas semanas han abierto peligrosos boquetes en el suelo.

Abal sostiene que la responsabilidad del mal estado de este sendero es del Ayuntamiento, e insta al grupo de gobierno a tomar cartas en el asunto cuanto antes, para prevenir un accidente. “Cualquier día va a pasar algo grave”, afirmó el edil de la oposición, quien recuerda que la ruta es utilizada por numerosos vecinos y visitantes (también por muchos peregrinos que hacen la Variante Espiritual), algunos de los cuales van en bicicleta, por lo que su margen de reacción ante un imprevisto es más reducido.

“Estas semanas está lloviendo bastante, y este tipo de sendas piden estar un poco pendientes de ellas y hacerles un mantenimiento mínimo”, añade José Ramón Abal

La ruta del Umia comunica Pontearnelas, en Vilanova, y Cabanelas, en Ribadumia; entre ambos puntos, la ribera discurre por la parroquia cambadesa de Oubiña, y según Abal en ese tramo existen deficiencias muy notables.

Además, plantea que esta situación no es exclusiva del sendero del Umia. “En el paseo de A Seca hay otro puente de madera que está podrido. Las sendas de Cambados están muy abandonadas, y la madera requiere que se le aplique unos tratamientos periódicos para protegerla del agua”, añadió.

Hace unos años, varios senderistas resultaron heridos de consideración tras desplomarse un paso de madera que salvaba el río San Martiño, muy cerca del monasterio de Armenteira. El alcalde de Meis en aquel momento, José Luis Pérez, atribuyó el suceso a un acto vandálico, si bien un examen posterior de los puentes revelaba que su estado de mantenimiento también era muy mejorable.

La ruta del Umia enlaza posteriormente con la de la Pedra e da Auga, que termina en el monasterio de Armenteira.

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