La Festa dos Cogomelos de Vilagarcía regresa con éxito de público

A Cantarela despachó medio millar de raciones en la vigesimoctava edición del evento gastronómico

Un grupo de comensales recogiendo sus raciones.  | // IÑAKI ABELLA

Un grupo de comensales recogiendo sus raciones. | // IÑAKI ABELLA / A.Martínez

Vilagarcía

La larga pausa dictada por el COVID no pudo con la Festa dos Cogomelos de Vilagarcía. Tres años después de la última edición, el evento gastronómico organizado por la asociación A Cantarela regresó ayer con éxito de público. Se vendieron unas 500 raciones de comida y, como es habitual año tras año, el rey indiscutible volvió a ser el arroz, que el equipo coordinado por Rubén García preparó con verduras, pollo, dos variedades de champiñón, pleurotus y shiitake.

No obstante, el arroz debió compartir protagonismo con el marmitaco de atún, que se cocinaba por primera vez en A Peixería. El guiso llevaba una base de cebolla, ajo, tomate y pimiento choricero, las imprescindibles patatas chascadas y tres tipos de setas, pleurotus, shiitake y seta de cardo, que los cocineros añadieron a la cazuela cuando faltaban diez minutos de cocción.

Posteriormente, el atún se incorporó justo antes de apagar el fuego. El resultado fue un plato que hizo las delicias de quienes se animaron a probarlo, más si cabe porque el tiempo fresco de la jornada hacía muy apetecibles este tipo de preparaciones calientes.

Los demás platos

El menú se completaba con los pimientos de piquillo rellenos de setas, y las habas. Todas las raciones costaban siete euros, un precio que incluía el pan, un vaso de vino, los cubiertos y una cazuela de barro de recuerdo. Los que querían repetir la misma ración de comida u otra distinta podían hacerlo por tres euros. “El marmitaco gustó mucho, pero el arroz volvió a ser lo más vendido, solo de arroz se vendieron prácticamente tantas raciones como de los otros tres platos”, afirma Rubén García, que contó con la colaboración en la cocina de media docena de personas.

Rubén García (izquierda), junto a su equipo de cocina.

Rubén García (izquierda), junto a su equipo de cocina. / INAKI ABELLA DIEGUEZ

Y mientras ellos cocinaban, una veintena larga de personas trabajaron desde primera hora de la mañana para tenerlo todo preparado en el interior de la plaza. Los mostradores se situaron en el lateral del fondo, y entre estos y las cristaleras exteriores dispusieron más de veinte mesas para la comida, con sus correspondientes manteles.

El almuerzo atrajo de nuevo a mucha gente, incluso de fuera de O Salnés, como fue el caso de un matrimonio de Vigo asiduos a la fiesta de Vilagarcía. Os Terribles de Arousa amenizaron la velada con su música tradicional, mientras el jurado del concurso gastronómico degustaba los platos presentados al certamen. En la modalidad de recetas saladas, el ganador fue Jorge Míguez Paz, que presentó unos huevos rotos, mientras que en la categoría de dulces, el primer premio le correspondió a Milagros García Somoza y su turrón de setas.

Termina el fin de semana

El Outono Micolóxico que organiza A Cantarela finaliza el próximo fin de semana con las dos últimas actividades. El sábado, 26 de noviembre, el Auditorio acoge a las 18.00 horas la sesión de clausura, en la que se entregarán los premios de los concursos de fotografía y dibujo escolar. Y el domingo 27 es el Xantar Micolóxico.

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