La presidenta de la Diputación, Carmela Silva, visitaba de ayer la obra que este organismo acaba de acometer en la localidad meañesa de Cobas. Lo hacía en compañía del alcalde de Meaño, Carlos Viéitez, junto con sus ediles Ramón Tilve y Ramón Alfonso, por cuanto la obra se realizó merced a la entente entre ambas administraciones. Las autoridades, que se encontraron en la zona que luce ya adoquinada en Aldea de Abaixo, desafiaron bajo el paraguas la lluvia que caía a esa hora de la mañana.
La obra en cuestión responde a la mejora de la carretera interior que baja de Cobas a Padrenda. Se trata de un vial de 800 metros, que se inicia en la EP-9305 que pasa por Cobas -donde justo se citaban ayer- y acaba abajo, en Padrenda, desembocando en una rotonda construida para su entronque con la EP-9305 que atraviesa esta parroquia rumbo a Ribadumia.
Una obra que se vino dilatando durante casi una década, por cuanto en su proyecto original, la ampliación y mejora del mismo se habían iniciado de facto en el año 2013. Desde entonces, con cambios en el proyecto y visitas de mandatarios políticos de por medio durante estos 9 años, la situación acabó por exasperar a vecinos colindantes y usuarios del vial.
Ahora, aquella estrecha y sinuosa carretera, queda convertida en un vial digno, con una plataforma de entre 6 y 7 metros de ancho -según las zonas-. Añadido, cuenta con una red propia de pluviales, arcenes de medio metro, uno de ellos a modo de senda peatonal remarcada en color diferente. Para este fin, la Diputación aprobó una partida de 537.130,41 euros, más 34.539,75 euros para la ocupación de terrenos necesarios.
Otras inversiones
En la visita, la delegación no incluyó la otra obra, que Diputación y Concello acometen también en Cobas, justo colindante con la parte alta de este vial visitado.
Se trata de un tramo de 150 metros que discurre entre los puntos kilométricos 2,400 y 2,550, de la EP-9305, inmerso en la zona de furanchos de la localidad, que son el gran atractivo de Cobas cada fin de semana.
El tramo en cuestión, donde se ha procedido a levantar el aglomerado, permanece cerrado al tráfico rodado permitiéndose únicamente el paso de vehículos a los residentes, y que suele reabrirse de forma provisional fuera de las horas de trabajo, circulando con la lógica precaución.
Desviación
Como alternativa, se tira de la desviación por la carretera de Padrenda, que es la socorrida para aquellos que quieran dirigirse a Ratón o la parte alta de Cobas, o bien los vecinos de estos lugares que deseen acercarse a Meaño.
Esta otra actuación se encuadra dentro de la iniciativa de “peatonalización amable” que promueva la Diputación. Ello conlleva dotar el tramo de una plataforma elevada sobre el resto, la cual será compartida por peatones y tráfico rodado, debiendo este último circular a velocidad reducida.
A la par, se procederá a disponer tendido eléctrico y telefónico subterráneos, se habilitará nueva iluminación LED y se construirá una recogida de aguas pluviales, otra de alcantarillado.
