La empresa valguesa Extrusionados Galicia S.A. (Extrugasa), con una superficie total de 160.000 metros cuadrados de terreno en los que se asientan 80.000 de naves industriales dedicadas al aluminio en todas sus variantes, es una de las referencias indiscutibles del sector a nivel mundial. Y lo demuestra a diario, dejando patente su firme apuesta por la innovación y la internacionalización.
Algo que esta empresa, históricamente abanderada por Andrés Quintá, volvió a poner de manifiesto esta mañana, cuando recibió la visita del delegado territorial de la Xunta, Luis López.
Tras visitar las instalaciones, resaltó que se trata de “un grupo de referencia internacional en el tratamiento y diseño del aluminio; perfecto ejemplo del moderno sector industrial que tenemos en Galicia y motor generador de riqueza”.
Con Iván Caamaño
Acompañado del concejal catoirense Iván Caamaño, el conservador que ejerce como responsable de las relaciones institucionales entre el municipio socialista y la Xunta, Luis López se mostró admirado con el enorme potencial de la compañía.
Lo hizo al tiempo que alababa la “impecable y creciente trayectoria” de Extrugasa desde sus orígenes en década de los sesenta, bajo el nombre de Galipan.
Ya en 1981 pasó a denominarse Extrugasa, y desde entonces esta empresa asentada en la parroquia de Campaña no ha dejado de crecer y conquistar mercados internacionales.
Por eso dispone, por ejemplo, de “infinidad de matrices diferentes con diseños para sectores como la automoción, transporte, industrias ferroviarias, aeronáutica, naval, eólica, fotovoltaica y militar, ingeniería mecánica y eléctrica, señalización, iluminación, climatización, interiorismo, arquitectura efímera, mobiliario o rotulación”.
Todo ello para conseguir “una amplia gama de sistemas de aluminio que satisfacen las más altas expectativas en calidad”.
“Cuando una empresa lleva cuarenta años creciendo, mejorando y tratando de superarte en un sector tan competitivo como el industrial, solo se puede decir que es un ejemplo de trabajo y capacidad”, concluyó Luis López.
