Los conductores que circulan habitualmente por la Autovía do Salnés y por la vía rápida de Vilagarcía dispondrán a partir de 2024 de dos aparcamientos disuasorios, que contarán en ambos casos con puntos de recarga para vehículos eléctricos. Estas infraestruturas fueron presentadas ayer por el delegado de la Xunta en Pontevedra, Luis López, en un acto en Saiar (Caldas de Reis), donde se ubicará otro aparcamiento similar. Se da la circunstancia de que en este último lugar ya es habitual ver coches estacionados, de gente que comparte vehículo para sus desplazamientos de trabajo por la Autopista do Atlántico.
El proyecto lo impulsa la Consellería de Infraestruturas, con financiación europea de los Next Generation, y salió ayer a exposición pública, abriéndose por lo tanto un plazo para la presentación de alegaciones. El proyecto obligará a expropiar seis parcelas, para lo cual se ha habilitado una partida de 100.000 euros. Los estacionamientos serán de uso gratuito, y estarán a las afueras de los pueblos y en zonas adyacentes a las principales vías de comunicación.
El aparcamiento de Vilagarcía supondrá una inversión de 509.000 euros, estará ubicado en Cornazo, cerca de la rotonda de la vía rápida de Vilagarcía a Cambados y de la carretera nacional 640. Contará con 59 plazas, distribuidas en una superficie de 1.950 metros cuadrados y habrá dos puntos de recarga para vehículos eléctricos.
En Ribadumia, el aparcamiento disuasorio se ubicará en Barrantes, en torno a la rotonda entre la Autovía AG-41 y la vía rápida a Cambados, y se distribuirá en una superficie de 2.815 metros cuadrados con 77 plazas y tres puntos de recarga eléctrica. La inversión estimada es de 431.000 euros.
Finalmente, en Caldas, el aparcamiento se ubicará junto al acceso 110 a la autopista AP-9. Su inversión alcanzará los 524.000 euros. Su superficie será de 2.100 metros cuadrados, que permitirán albergar 72 coches y tres puntos de recarga.
Las plazas de aparcamiento tendrán unas dimensiones de 2,5 por 5 metros, aunque en algunos casos podrían variar por cuestiones de espacio. Los carriles de circulación interior de estos tres aparcamientos tendrán una anchura de entre 3 y 4,2 metros. Luis López resaltó en su comparecencia que mientras el Gobierno central “crea confusión” con sus anuncios sobre el acceso de vehículos antiguos a las ciudades, la Xunta trabaja para favorecer una movilidad más eficiente.
Antes de esta visita, Luis López estuvo en Vilagarcía, para hablar del proyecto de aceras entre Bamio y Carril.
Sale a exposición pública la senda de Bamio a Carril
La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade de la Xunta anunció ayer que ha sacado a información pública la obra de construcción de una senda peatonal de 400 metros entre Bamio y Carril, en Vilagarcía. La inversión ronda los 330.000 euros. Con esta obra se pretende mejorar sensiblemente la seguridad de los peatones en el entorno de las carreteras PO-548 (Pontecesures-Vilagarcía) y PO-192. El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Luis López, presentó ayer la actuación en una visita en la que estuvo acompañado por los concejales Paola María, Lino Mouriño y Ana Granja.
“Esta es una obra muy necesaria en un lugar muy complejo para los peatones por la confluencia de vías y el alto nivel de tráfico. Por eso ha sido necesario un trabajo técnico para encontrar la solución más adecuada”, ha dicho el representante de la Xunta. El plazo de exposición pública y recogida de alegaciones es de 30 días, y la previsión de la Xunta es que los trabajos empiecen en 2023. El proyecto afecta a cinco parcelas de uso agrícola que suman menos de 230 metros cuadrados. El Ayuntamiento de Vilagarcía agradece el compromiso, pero lamentó que la senda termine a la altura del cementerio, pues Ravella defiende que debería llegar hasta Carril por la seguridad de los viandantes.
