Carlos García saca pecho, y nunca mejor dicho. Este carrilexo de 37 años con sobrada experiencia en los parques de cultivo y culturista desde 2018, es ahora uno de los aspirantes a patrón mayor en Galicia.
Compite directamente con alguien tan experimentado y con tantos avales a sus espaldas como José Luis Villanueva Vicente, patrón mayor hasta no hace mucho y presidente de la agrupación Parquistas de Carril, para la que recientemente consiguió el título de Organización de Productores (OPP-89).
Lo que hace Carlos García, al que algunos conocen como Carlos Berride, la mayoría como Toro –sobran más explicaciones al tenerlo cerca– y unos cuantos como Vikingo, es representar una corriente alternativa en la que se agrupan personas que quieren “renovar por completo” la junta general del que es uno de los pósitos más importantes de Galicia.
Con su casi dos metros de altura, un peso de más de cien kilos y unos brazos curtidos entre pesas y “raños,” Carlos García presenta sus credenciales arropado por vecinos de Carril no menos conocidos, como es el caso de María Abelenda “Transi”, hija del fallecido Moncho “Pasensias”.
Ella es una de la integrantes de la candidatura que arropa a Toro presentada en el censo de parques de cultivo. De la que también forman parte Nellys Polo Ospino, Juan Vidal Muñiz, Luz María Caamaño Castelo, María Sonia Muñiz Fernández y José Ángel Longa Durán.
Junto a ellos, parquistas como Ana Belén Rivas Conde, María del Pilar Ferreirós Caamaño, Isabel Cores Ferreiro, José Manuel Porto Maneiro y Juan Narciso Longa Sánchez.
Con estos mimbres, Carlos García Berride quiere desbancar a José Luis Villanueva y su equipo, desde el convencimiento de que debe construirse la casa “desde los cimientos”. Y eso implica “transformar la cofradía, nuestro punto de venta y la gestión diaria de nuestro trabajo”.
El objetivo inmediato del parquista, en caso de ser proclamado patrón mayor, será “devolver a la cofradía su razón de ser”.
Por eso sentencia que su equipo quiere “diferenciar entre ostentosidad y saber invertir”. Algo que aplicará mediante “una hoja de ruta que tenemos muy clara y nos llevará a centralizar todas las gestiones propias de la cofradía, sin necesidad de depender de otras asociaciones”.
Regenerar los terrenos de Malveiras, Briñas y Con, aportar áridos a los parques de cultivo y bancos marisqueros y “devolver la dignidad a todos los trabajadores de la cofradía, para que realicen su trabajo sin miedo y sin presiones”, son otros de los objetivos marcados por “Toro”.
Así como aplicar un horario de lonja “acorde con las necesidades de los usuarios” y “revisar todo el sistema de cribado y pesaje”.
Un programa con el que Carlos Berride García y su equipo tienen la difícil labor de desbancar a una candidatura que se presenta a las elecciones “con una cofradía saneada económicamente, nueva maquinaria de cribado y pesado, un sistema de vigilancia en los parques de cultivo y una fuerte promoción de la almeja de Carril, entre otros logros”.
El sábado, con la jornada electoral en las cofradías gallegas, se resolverá el pulso entre Toro y José Luis Villanueva.
