Quedó en un susto, pero pudo ser todavía más grave de haberse originado en una zona con una mayor densidad de viviendas. Los vecinos de la zona de Os Carballos, O Monte y la fuente de Palmeira se sobresaltaron en la noche del pasado domingo con la aparición de un pequeño “tornado” que se llevó por delante dos muros y el tejado de un pequeño tinglado, además de dañar todo lo que encontró a su paso en cerca de 200 metros. Los hechos tuvieron lugar sobre las 23.00 horas, cuando los efectos de “Beatrice” arreciaban en toda la ría de Arousa. Fue en ese momento cuando se desató la furia de la naturaleza, cuando los vecinos de la zona de O Monte comenzaron a ver volar parte del tejado de una nave y como se caían los muros, incluidos los postes de granito.
“Fue todo muy repentino, nadie se esperaba que ocurriese algo así y menos que pudiese dañar muros, pero en cuestión de segundos estaba todo volando por el aire”, explica Fino Gondar, uno de los propietarios más afectados por el paso del tornado. Gondar reconoce que, dentro de los daños a los que tendrán que hacer frente, “fue una suerte, ya que pasó por una zona en la que no hay viviendas, aunque sí las hay muy próximas”. El fenómeno meteorológico fue sumamente intenso aunque, afortunadamente, de muy corta duración pese a los daños importantes que causó
Las familias afectadas se afanaban ayer por la mañana a hacer el recuento de los daños provocados por el tornado, además de contactar con las aseguradoras para el peritaje de los mismos. Un grupo de operarios también se centraba en reparar los daños en el tejado del galpón. “Todavía no tenemos calculado los daños, pero ascienden a varios miles de euros casi seguro”, explicaban ayer.
Aunque no son habituales este tipo de situaciones, especialmente en tierra, si existen numerosas referencias a sucesos similares en el mar, donde los tornados son catalogados como mangas marinas. De hecho, el último de ellos del que hay constancia en la ría de Arousa se originó en las costas de A Illa en mayo de 2019, cruzando una gran zona de terreno a velocidad vertiginosa, para deshacerse en las inmediaciones de tierra.
Talan el árbol caído en el Xardín Umbrío
El Concello de Vilanova taló ayer el árbol que, el pasado domingo, cayó en el Xardín Umbrío. Para ello, los operarios municipales tuvieron que cortar al tráfico la avenida do Recheo a fin de facilitar las tareas de retirada del árbol. Este no va a ser el único árbol que se va a talar en los próximos días, ya que los dos adyacentes se encuentran en un pésimo estado y, antes de que puedan derrumbarse y provocar un grave riesgo a la población, el Concello ha decidido eliminarlos. También se va a retirar otro árbol que cayó en el interior del recinto del colegio Julio Camba de Vilanova. Javier Tourís, teniente de alcalde de Vilanova, reconocía ayer que “vamos a sacarlos por seguridad y porque se encuentran en mal estado”, algo que avala un informe de los técnicos municipales, que recomendaron la eliminación de todos estos árboles ante el riesgo de una posible caída con graves consecuencias.
