El temporal “Beatrice” dejó una ráfaga máxima de viento de 125 kilómetros por hora en la estación meteorológica de Corón (Vilanova), y un reguero de incidencias, que han obligado a los equipos de emergencias a redoblar esfuerzos desde las siete de la mañana hasta primera hora de la tarde de ayer domingo. Una de las más significativas se produjo en el puente interprovincial de Catoira, que estuvo cortado al tráfico en dos ocasiones, debido al desprendimiento de algunas planchas de la cubierta de la zona de paso peatonal. Los bomberos de Vilagarcía tuvieron que acudir con una autoescalera para retirar alguno de los elementos metálicos antes de que cayesen.

Por este motivo, los vehículos que circulaban entre Rianxo y Catoira debieron dar la vuelta en Pontecesures, lo que les supuso un incómodo rodeo de varios kilómetros. Solo se permitía el paso de quienes iban a pie, como unos peregrinos que se desplazaban en bicicleta o una joven que se dirigía a la estación de tren de Catoira.

Un árbol destrozó un muro de cierre en Vilaxoán. | // IÑAKI ABELLA

Sin salir de este municipio, un árbol cayó sobre la carretera en Dimo, lo que ha obligado a los equipos de emergencias a intervenir para evitar accidentes.

Vilagarcía y O Grove

Vilagarcía y O Grove fueron otras dos de las poblaciones más afectadas por las rachas de viento, que en algunos momentos llegaron a los 125 kilómetros por hora. Aunque también llovió por momentos con cierta intensidad, no se han producido incidentes relevantes por agua.

En Vilagarcía, los instantes más complicados se vivieron entre las 9 y las 11 de la mañana. Poco antes de las 10.00 horas, una valla publicitaria se desprendió en la avenida Rosalía de Castro, y una farola se desplomó sobre la calle en Valentín Viqueira (Carril). El punto de luz cayó sobre dos coches que estaban estacionados, y la Policía Local tuvo que asegurar el tráfico, puesto que el poste invadía uno de los carriles de circulación.

Valla publicitaria caída en Rosalía de Castro (Carril). | // IÑAKI ABELLA

Siguiendo en Vilagarcía, las fuertes ráfagas de viento tumbaron vallas de obra en el paseo marítimo, donde a pesar del mal tiempo hubo gente paseando, aunque mucha menos que en una mañana de domingo normal.

La Policía Local de Vilagarcía fue requerida también por un canalón roto en la calle del Carmen, en pleno centro de Carril, y por un árbol que cayó sobre el tendido eléctrico en la carretera que comunica Trabanca Badiña con Castroagudín.

Finalmente, cayeron al menos tres árboles en la carretera de Vilaxoán por orillamar, dos de ellos en el parque de O Preguntoiro.

En O Grove, el temporal ha provocado la caída del tendido telefónico y de la fibra óptica en Terra de Porto. El servicio municipal de emergencias tuvo que retirar el cableado en su totalidad. También cayó un poste de telefonía en Rons.

Cerrado el Xardín Umbrío

En Vilanova, un árbol de gran porte se desprendió parcialmente en el Xardín Umbrío. No llegó a caer, puesto que las ramas quedaron apoyadas sobre las de otros ejemplares, pero la Policía Local y Protección Civil cerraron inmediatamente el paso a este céntrico parque vilanovés, para evitar sustos.

Está previsto que el servicio municipal de Obras acuda hoy lunes temprano a la zona para cortar el árbol. También en Vilanova, otro árbol cayó empujado por el viento en el recinto del colegio Julio Camba, afectando a un canalón del edificio. La mayor intensidad del viento se registró en las zonas costeras (en A Lanzada, Meteogalicia consignó una racha máxima de 102 kilómetros por hora), siendo mucho más moderada en el interior de la comarca. En Barrantes, por ejemplo, fue de 61 kilómetros por hora.

Los voluntarios de Ribadumia se levantaron a las 6 para ayudar a un vecino sin medios para regresar a casa

Asimismo, se han producido caídas de árboles en Ribadumia y Cambados. En esta última localidad, Protección Civil se desplazó a una de las pistas paralelas a la vía rápida, mientras que en Ribadumia el equipo municipal de voluntarios tuvo intervenciones en Leiro, Sisán y Mamuela. En varios casos, el viento había tirado árboles sobre carreteras o pistas. Se da la circunstancia de que Protección Civil de Ribadumia acudió a su primera actuación a las seis de la mañana, para atender a un hombre que durante la madrugada se había sentido indispuesto y que fue trasladado en ambulancia al servicio de urgencias del centro de salud de Cambados. Pero con las prisas había salido prácticamente con lo puesto, de ahí que cuando le dieron el alta no tenía con qué regresar a casa. Por ello, llamó a Protección Civil, por si podían echarle una mano. “A partir de ese momento ya fue un no parar”, explica el presidente de la agrupación, Andrés Otero, al coincidir con el paso más intenso del temporal.