José Cacabelos Rico, el alcalde socialista de O Grove, es plenamente consciente de lo mucho que se juega su pueblo en los próximos días. Sabedor de que “toda España va a estar muy pendiente de nosotros”, confía en proyectar la mejor imagen posible de la localidad, tanto con la Festa do Marisco, que vuelve a escena tras dos años de parón a causa del COVID, como con el Foro La Toja, que va a inaugurar Su Majestad el Rey Felipe VI.
Ambos acontecimientos se inauguran mañana, en el primer caso para volver a demostrar que es la fiesta gastronómica más importante del país, y en el segundo, para propiciar el debate político, social y empresarial a partir de la participación de ilustres oradores y destacados dirigentes y/o líderes políticos, como los expresidentes Felipe González y Mariano Rajoy.
Respecto a la cita con el “comedor de Galicia”, Cacabelos resalta que “después de dos años de inactividad debido a la pandemia, esta 59 edición es casi como un estreno que nos llena de responsabilidad e incluso nos pone nerviosos”.
Al igual que es “una inmejorable oportunidad para que todos nos demos cuenta de lo mucho que representa la fiesta y del enorme esfuerzo que requiere, ya que prácticamente toda la maquinaria organizativa y logística del Concello debe estar a pleno rendimiento trabajando casi en exclusiva para la Festa do Marisco”.
Lo cual lo lleva a decir que “las expectativas son enormes”, que las reservas hoteleras “están funcionando bien” y que, como siempre, la fiesta ofrece “producto de la máxima calidad a un precio muy asequible”.
El alcalde de O Grove sabe que la Festa do Marisco no solo significa vender decenas de miles de raciones de producto en las carpas instaladas en O Corgo, sino que se trata también de un motor económico indiscutible que genera riqueza en el conjunto del sector turístico y el comercio, con especial incidencia en los barcos de pasaje, los hoteles y los restaurantes.
Un espaldarazo para la economía local al que también contribuye, reconoce el primer edil, el ya consolidado Foro La Toja, que promueve el grupo hotelero Hotusa en la isla de A Toxa.
“Es ya una referencia internacional de enorme calado y proyección que proyecta una gran imagen de O Grove y genera una muy importante actividad económica, tanto en los hoteles y restaurantes como en todo tipo de actividades o negocios”, reflexiona Cacabelos.
En definitiva, que “estamos ante dos eventos fundamentales que generan riqueza y nos posicionan como destino de referencia”.
El momento de las botas de goma
Como dato anecdótico puede recordarse que hace semanas se decía en FARO de que un artista urbano anónimo había colocado en O Corgo unas mugrientas botas de goma.
Los turistas las consideran desde entonces una especie de monumento, de ahí que no dejen de fotografiarlas.
Y resulta que allí siguen, ahora situadas dentro del recinto de la Festa do Marisco, por lo que todo indica que esas botas van a cobrar un protagonismo aún mayor.
