Juan Francisco Prieto Cacabelos, al que todos conocen como "Pichi", ya está en marcha en su nuevo reto solidario, esta vez a favor de la delegación en O Grove de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC).
De nuevo subido a su bicicleta, a la que se refiere con el apodo de su familia materna, "Pichochas", el experimentado ciclista meco se dispone a completar nada menos que 5.300 kilómetros, desde el fiordo de Trondheim, en el centro de Noruega, hasta Santiago.
Este ciudadano grovense tiene 57 años y sobrada experiencia en este tipo de aventuras, pues, entre otras muchas, ya hizo más de 4.000 kilómetros en bici para dar la vuelta a la Península Ibérica, completó 1.600 para ayudar a Cáritas O Grove y recorrió 2.970 kilómetros entre Roma y Santiago de Compostela para ayudar a la asociación comarcal Anduriña, de apoyo a las personas con discapacidades.
Ahora, la gasolina que mueve sus pedales son sus ganas de colaborar en la lucha contra el cáncer, dando visibilidad a la enfermedad y a la necesidad de arropar a quienes lo padecen y a sus familias.
De ahí que anime a la sociedad a colaborar, ya sea “apadrinando su propio kilómetro” de este recorrido, a través del enlace www.migranodearena.org/widget/pedaleando-contra-el-cancer, o bien ingresando donativos en Abanca, con el número de cuenta ES76-2080-5401-5430-4020-3035 y la referencia “Pedaleando contra el cáncer”.
Tan ilusionado como estaba cuando hizo 1.847 kilómetros desde Ginebra (Suiza) o recorrió 1.284 por las riberas del río Duero, Pichi afronta así un reto al alcance de muy pocos que comenzó durante el finde en el fiordo de Trondheim, en el centro de Noruega.
Circunstancia que aprovechó para seguir haciendo lo que sus seguidores en las redes sociales esperan de él, como es verlo compartir fotos y vídeos que resuman sus vivencias durante el viaje, el cual, de este modo, suma a sus fines solidarios una clara vertiente de divulgación turística.
De ahí que mostrara ya, por ejemplo, la catedral gótica de Nidaros, que data del siglo XI, y que compartiera momentos como los vividos en sus dos primeros días de ruta con Bárbara, una peregrina alemana que hace el Camino en bicicleta.
También se fotografió con Ricardo, un italiano llegado al centro de peregrinos de Trondheim haciendo autostop desde Cabo Norte, un promontorio localizado en la isla de Magerøya, en el norte de Noruega, cuyo acantilado, de 307 metros de altura, está considerado como uno de los puntos más septentrionales de Europa.
Así arranca este nuevo reto de “Mis pedaladas, tus pasos”, que es como "Pichi" presenta sus aventuras solidarias, en esta ocasión haciendo hincapié en que “el cáncer puede afectar a cualquiera de nosotros o a nuestros familiares y amigos”.
Por eso cree necesario “seguir consiguiendo fondos para que se invierta en investigación y para desarrollar acciones de apoyo a enfermos y familiares como las que lleva a cabo la AECC en localidades como O Grove”.
