La ocupación del polígono de Baión (Vilanova de Arousa) sigue en punto muerto y por tanto los quinientos empleos directos que proponían generar las siete empresas que adquirieron parcelas se retrasan en paralelo.
Suelo Empresarial del Atlántico (SEA), que gestiona entre otros el parque empresarial vilanovés, intentó el pasado año acelerar la ocupación de este polígono, situado estratégicamente en el límite con Vilagarcía y Caldas; por tanto con unas infraestructuras para el transporte envidiables pues conecta con todo el cinturón de Vilagarcía, el Puerto y muy cerca de la Autopista del Atlántico.
El motor para su desarrollo se encomendó a Sogama que proyecta la construcción de una gigantesca planta para el compostaje de orgánicos de media provincia de Pontevedra, con unos plazos muy medidos para cumplir con criterios medioambientales europeos, con un plazo final de 31 de diciembre de 2023. Y al menos otras seis empresas más.
Sogama ha adjudicado a la UTE Cespa – Arias Infraestructuras, – Petrolam Infraestructuras – Prace, por un importe de 15.109.215 euros (IVA incluido), la obra de ejecución y puesta en marcha de la planta de biorresiduos.
Esta instalación iba a integrarse en la red de infraestructuras diseñada por la Xunta para que la mayor parte de los ayuntamientos adheridos a Sogama puedan acceder a la valorización de la materia orgánica mediante su conversión en compost e iba a dar servicio a 26 concellos (326.846 habitantes), con capacidad para tratar hasta 15.000 toneladas anuales de materia orgánica y otras 7.000 toneladas de podas y restos de madera, y producirá alrededor de 6.000 toneladas/año de compost, que se destinará al sector de la agricultura como abono natural y sostenible, en sustitución de los fertilizantes artificiales
La previsión era que las instalaciones integradas en esta red, a la que se destina una inversión de 38.600.000 euros, entrasen en funcionamiento a finales de 2023, propiciando que, junto con otras plantas públicas y privadas de compostaje, la recogida selectiva de los residuos orgánicos sea una realidad en Galicia y se avance de forma sustancial hacia el cumplimiento de los objetivos europeos de reciclaje para el año 2025.
Pero el polígono sigue desierto con las mismas firmas que se instalaron hace diez años, entre ellas Soaga que tampoco llevó aún a cabo las obras de ampliación en su último solar.
La gerente, Beatriz Sestayo, ha firmado ante notario con el presidente de Soaga, Carlos Vila, la venta de esta nueva parcela, que asciende a 2.715 metros cuadrados, por un importe de 214.228 euros. Soaga, que fabrica y distribuye proyectos para la agricultura y la ganadería, desde fertilizantes hasta alimentos animales o semillas, cuenta con una plantilla total de 120 trabajadores y ocupaba ya cuatro parcelas en Vilanova.
Pero casi un año después de las operaciones de venta y alquiler de terrenos, en todo el polígono solo puede verse una excavadora que lleva largo tiempo estacionada en una de las fincas cerradas después de la explanación de los terrenos que les fueron adjudicados.
La siguiente firma que daría impulso al parque vilanovés es Vinova Group, vinculada a “Conxelados Cíes”, que eligió la manzana 3 del polígono para su nuevo proyecto de conservera, con una ocupación de 19.229 metros cuadrados de superficie. Vinova Group se proponía poner en marcha la instalación en enero de 2023, con una inversión de 24 millones de euros con lo que iba a movilizar en obra hasta a 350 personas.
Conservera Vinova, que ocupará cerca de 20.000 metros cuadrados, plantea la construcción de una de las mayores plantas frigoríficas de Galicia, en la que prevé emplear a más de un centenar de personas.
También se interesó por este espacio “Conservera Gallega” que se adjudicó en Derecho de Superficie una parcela con el fin de aumentar su actividad.
La inflación consecuencia de la guerra de Ucrania, la crisis de materiales y las preocupantes expectativas económicas podrían haber influido en esta paralización de uno de los polígonos que SEA pretendía reactivar de inmediato, junto con el de Catoira.
Recientemente, el alcalde de Sanxenxo mostraba su optimismo por los avances en el polígono de Nantes donde acaba de inaugurarse un tanatorio a bombo y platillo.
Solares vallados para empresas que buscan expandirse
Una de las empresas que han movido ficha en el último año para ocupar espacios del polígono de Baión es el taller Francisco Dios e Hijos que además de haber explanado los terrenos los ha cerrado con vallas para poder iniciar en algún momento los trabajos de construcción de la nave en la que desarrollará su expansión. Se cumple este mes un año desde que el responsable de esta firma Javier Dios exponía su interés por iniciar de inmediato los trámites para construir las nuevas instalaciones con la idea de aumentar su actual producción que sigue centralizada en A Illa donde cuenta con una plantilla de diez empleados. La empresa se dedica a la fabricación de maquinaria para el sector alimentario por lo que su ubicación en A Illa se había quedado pequeña. En estos momentos tiene posibilidad de construir sobre una parcela de 2.600 metros cuadrados, limítrofe con la de Soaga, firma que ya lleva tiempo en funcionamiento. A este sector industrial también se sumaba otra empresa de carpintería metálica y que adquirió el año pasado una parcela de 2.196 metros cuadrados en la manzana 5. Relevante es también el proyecto de Tex Gestión Energética que se adjudicó una parcela de 2.991 metros cuadrados.
