Somos Ribadumia afirma que la técnica de Turismo trabaja en su puesto a casi 40 grados

El concejal de Somos Ribadumia, Enrique Oubiña, denuncia que la empleada que atiende la oficina municipal de turismo ha trabajado durante los últimos días a unas temperaturas próximas a los 40 grados centígrados, y sin acceso a agua corriente o unos sanitarios.

El edil critica con dureza al equipo de gobierno. Plantea que el alcalde sí tiene aire acondicionado en su despacho, “y no voy a pedirle que lo apague, pero sí que trate al personal municipal con la mínima humanidad y dignidad obligatoria”.

El representante de Somos en la corporación afirma que la oficina de turismo de Ribadumia es una caseta de madera en la que habitualmente hace mucho calor porque tiene una mala ventilación, y que carece de agua corriente y de servicios.

Por eso, se muestra extrañado por el hecho de que la Diputación de Pontevedra le conceda al Ayuntamiento una subvención de hasta el 60 por ciento del coste de la contratación de la técnica de turismo. En opinión de Oubiña, el ente provincial, “debería controlar el uso de los recursos públicos en todos los aspectos, incluida la dignidad laboral de las personas”.

En el caso de la oficina de Ribadumia, se encuentra en la conocida como “rotonda de Os Castaños”, en un lugar donde confluyen no solo la vía rápida de Cambados y el acceso a la Autovía do Salnés, sino también la Variante Espiritual y la Ruta da Pedra e da Auga. Si situación, por lo tanto, es inmejorable. Pero según Oubiña, la caseta ya tiene diez años y apenas se le hizo mantenimiento.