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Un fuego de artificio deja solo las cenizas de una lancha deportiva de A Illa

El accidente se saldó sin heridos y tampoco hubo problemas de contaminación del agua/Iba a salir la procesión del Sacramento

La embarcación calcinada en el muelle do Campo. | // NOÉ PARGA

Una embarcación deportiva, con dos potentes motores fueraborda y unos siete metros de eslora, resultó totalmente calcinada a mediodía de ayer en A Illa de Arousa tras sufrir el impacto de uno de los cohetes de los fuegos de artificio que se lanzaron a mediodía por las fiestas del Sacramento que se celebran en la localidad.

El barco en llamas. | // REPRODUCCIÓN N. PARGA REDACCIÓN

El siniestro se registró sobre la una de la tarde, antes justo de la procesión con el Santísimo que recorrería el centro de la localidad y discurre por varias calles del entorno del muelle de O Campo, enfrente del de Pau, donde se encontraba fondeada la lancha siniestrada.

El fuego se propagó como la pólvora y engulló en media hora la lancha de poliéster. Al personal de emergencias y a los bomberos les resultó imposible atajarlo, quedando solo el “chasis”, explican los vecinos presentes.

“Tanto la embarcación como los dos motores están carbonizados”, indica Luis Arosa, edil responsable de Seguridad que participó personalmente en el operativo de extinción y fue a buscar el viejo camión motobomba del Ayuntamiento.

La maniobra para intentar contener el fuego se suponía compleja, pues era necesario acercar la barca en llamas hasta el muelle para permitir la intervención del camión motobomba municipal que casi inmediatamente fue auxiliado por los bombeiros de O Salnés. “Unos marineros de la localidad se acercaron con un bote neumático al cabo en la proa, que no ardía en ese momento, y consiguieron arrastrarla hasta el muelle donde en media hora finalizó la intervención”.

Las imágenes de la embarcación en llamas fueron espectaculares y la espesa humareda hicieron presagiar un desastre que finalmente se evitó, ya que no hubo víctimas personales ni tampoco un episodio de contaminación. “No había ni rastro de gasoil en el agua, es algo que nos extrañó”, admite Arosa.

Pero si son muy cuantiosos los daños en la lancha, una embarcación de estilo deportivo con la proa muy afilada y dos potentes motores fueraborda, cuyo precio puede superar los 40.000 euros.

La empresa pirotécnica presentó ya la póliza de responsabilidad civil, por lo que será el seguro el que se haga cargo de la indemnización.

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