La flota de enmalle, que es la que, de forma mayoritaria, se dedica a la pesca del centollo, se dispone a colgar definitivamente los aparejos utilizados para este recurso, los tradicionales “miños”.
Los seguirá usando, pero para otras especies, ya que el considerado en algunos puertos como el “rey de los mariscos” inicia en diez días una veda con la que se pone fin a una campaña que solo puede tildarse de histórica en el conjunto de Galicia.
Baste decir que desde el pasado mes de noviembre se despacharon en las lonjas de la comunidad 678 toneladas de este crustáceo por un importe de más de 6 millones de euros. Y son datos provisionales que aún mejorarán, pues las cofradías deben aportar aún los resultados de las subastas realizadas en los últimos días, así como los que se obtengan hasta que el día 25 comience la veda.
Esa es la fecha de cierre de temporada acordada entre la Consellería do Mar y las propias cofradías de pescadores, determinándose que se extienda hasta el 6 de noviembre, cuando volverán a largarse los “miños” para que el centollo regrese a los puertos, lonjas y mercados al día siguiente.
Es, en realidad, el período de veda acordado para las provincias de A Coruña y Pontevedra, mientras que en la de Lugo la prohibición se extenderá desde el 2 de julio al 27 de noviembre, ambos incluidos.
En cualquier caso, decir que se cierra el centollo en aguas coruñesas y pontevedresas es tanto como decir que lo hace en el conjunto de Galicia, ya que el dominio de sus lonjas es aplastante, como lo demuestra el hecho de que, de las 678 toneladas y los 6 millones de euros totales a los que se hacía referencia antes, únicamente correspondan a las “rulas” de A Mariña Lucense unas 25 toneladas y 216.000 euros.
El buey de mar seguirá en verano
Por cierto, que la misma comisión negociadora que pactó la veda del centollo acordó la fechas para la del buey de mar, cuya extracción estará prohibida en el conjunto de Galicia desde el 3 de septiembre al 6 de noviembre, ambos incluidos.
Respecto al centollo, se trata de un producto que, en realidad, ya escasea en las plazas de abastos y pescaderías desde hace semanas, sobre todo porque, como se explicó en su momento, el sector ya se estaba dedicando a otros recursos.
Además, son muchos los pecadores que, aún capturando centollo, devuelven numerosos ejemplares al mar, ya que se están topando demasiadas centollas ovadas.
En cuanto a los resultados del conjunto de la campaña que ahora agoniza, ya se había indicado a medida que avanzaba, que las capturas y cotizaciones estaban resultando fantásticas.
Para que el lector se haga una idea, puede reseñarse que esas 678 toneladas vendidas desde el pasado mes de noviembre hasta ayer (datos provisionales), por importe de 6 millones de euros, están muy por encima de las 645 toneladas y los 5,7 millones de euros correspondientes al mismo periodo de la campaña anterior.
Y, desde luego, a enorme distancia de las 392 toneladas y 4,4 millones de la campaña 2019-2020, así como de las 493 toneladas y 4,5 millones del periodo comprendo entre principios de noviembre de 2018 y mediados de junio de 2019.
O Grove
Podrían citarse todas las anteriores, ya que la actual temporada de pesca del centollo supera a todas ellas. Lo hace tras dejar en la lonja grovense 1,3 millones de euros por la venta de 91 toneladas de producto, que en este puerto tiene marca propia de calidad y diferenciación: “Centolo do Grove”.
Hay que citar a esta “rula” en primer lugar porque, como se dice siempre que se habla del centollo, es aquí donde alcanza las mejores cotizaciones, de ahí que esos 1,3 millones de euros superen, incluso, los 987.000 euros de la lonja de A Coruña. A pesar de que ésta vendió 85 toneladas más que la lonja grovense.
También la de Vigo obtuvo unos excelentes resultados en la presente campaña, en este caso con 873.000 euros ingresados por la comercialización de 94 toneladas.
Balance positivo que puede hacerse, igualmente, al hablar de Ribeira, toda vez que esta lonja arousana superó ya las 109 toneladas y los 974.000 euros.
Estas cuatro son, sin duda, las grandes referencias para el centollo en Galicia. A mucha distancia se sitúan lonjas como Bueu, con 11 toneladas y 142.000 euros, desde el pasado mes de noviembre; Cangas, con 19 toneladas y 247.000 euros, en el mismo periodo; Burela, con el mismo volumen y 160.000 euros; e incluso la “rula” de Cambados, que despachó unas 20 toneladas de este crustáceo, para obtener 280.000 euros.
En este “pelotón perseguidor” de las grandes lonjas “centoleiras” también hay que incluir la de Muros, con 28 toneladas y 204.000 euros, desde noviembre; mientras que Portonovo se quedó en 11 toneladas y 122.000 euros; y Laxe va por las 24 toneladas y los 173.000 euros.
