La celebración del Arousa Fútbol-7 ha confirmado el éxito en su balance definitivo. Lo atisbado durante los tres días de competición en A Senra ha quedado también patente en el análisis deportivo, social y de seguimiento realizado por la organización.
En lo que a asistencia se refiere para presenciar en directo los partidos en las instalaciones de Ribadumia, Alberto Diz apunta que “fueron cerca de 3.000 personas. Es cierto que el público suele ser cíclico, pero entre todas las aficiones y también los aficionados particulares pudimos rondar esa cifra”. No pasa por alto el portavoz de la organización la participación del colegio Julia Becerra Malvar, pues “en la mañana del viernes vinieron cerca de 300 escolares e hicieron que ya hubiese muy buen ambiente en A Senra desde el primer partido”.
Una cuestión que también quisieron destacar desde el Arousa Fútbol 7 fue la relativa a la importante presencia de aficionados llegados directamente desde ciudades como Dallas, París o Manchester para estar en Ribadumia. En este sentido, Alberto Diz hace un capítulo aparte con la delegación norteamericana, “vinieron cerca de 30 familiares y animaron al equipo mucho y bien. Todos con un comportamiento exquisito y es de valorar que el torneo haya traído a Ribadumia y comarca tanta gente extranjera y de otros lugares del país con todo lo que ello supone”. Añadió el organizador que “Dallas, por ejemplo, es una apuesta diferencial nuestra por procedencia, cultura y mentalidad deportiva y que hizo un gran torneo finalizando quintos”.
En cuanto a colorido en la grada, la presencia del Betis también se hizo notar. Su animosidad tampoco pasó desapercibida. “Recibían al equipo una hora antes del partido, cuando llegaban al campo. Todo con música flamenca y palmas”, apunta un Diz que también destacó el alto número de aficionados que arrastraron equipos de la fase previa como Escola Estrada o Pabellón de Ourense.
En lo estrictamente deportivo, desde la organización destacan el alto nivel y la instauración de una eliminatoria previa a cuartos de final que añadió alicientes a la fase de grupos. Alberto Diz, quien subrayó el apoyo del Concello de Ribadumia, también hizo énfasis en el esfuerzo llevado a cabo para poner de nuevo en marcha el torneo después de dos años de inactividad y que “supuso un trabajo extra”.
