La situación que viene arrastrando el colegio Sestelo de Baión es de sobra conocida en el Concello y, al igual que la comunidad escolar, el alcalde de Vilanova, Gonzalo Durán, entiende que se le debe poner fin y buscarle una solución a la ausencia de unas instalaciones deportivas. El regidor reconocía ayer que “vamos a abordar esta cuestión con la comunidad escolar para ver qué es lo que podemos hacer, y en función de lo que decidamos, acudiremos a la Xefatura provincial de Educación para que se actúe de una vez por todas”.
El regidor vilanovés reconoce que el colegio Sestelo de Baión es el único que carece de este tipo de instalaciones en las proximidades, ya que el resto de centros educativos de Vilanova “cuentan con un pabellón a escasos metros, pabellones que son usados todos ellos para las actividades que desarrollan en los colegios”. Esa es una de las razones por las que “estamos dispuestos a apoyar estas reivindicaciones ante cualquier ente político”.
No en vano, el colegio de Baión lleva más de treinta años aguardando por unas instalaciones deportivas adecuadas, treinta años en los que no le ha quedado otra que recurrir a una sala de 2’70 metros de altura y llena de columnas para la práctica del deporte o para que los niños puedan refugiarse cuando está lloviendo.
La comunidad escolar estalló esta semana y ya ha anunciado la celebración de una concentración a las puertas del colegio el próximo lunes, concentración que se puede repetir en el futuro si las administraciones competentes, Concello y Xunta, no toman medidas al respecto.
El centro ha experimentado un importante crecimiento en el número de alumnos en la última década, por lo que necesita instalaciones adecuadas y no una zona de “superficie insuficiente y que resulta un peligro para la integridad de los alumnos”, hasta el punto de que se hayan registrado colisiones entre los niños o contra los obstáculos que hay en ese lugar.