“Las obras del paseo de la playa de Compostela ofrecen un estado lamentable días antes de su entrega al Ayuntamiento”, denuncian los representantes de Vilagarcía en Común (VeC-EU) a través de un comunicado de prensa.
En este sentido, cuestional que el Gobierno local vuelva a consentir que se entregue una obra cuya ejecución todavía está pendiente y cuyo deterioro “es evidente”, a su juicio.
Son tres los motivos que argumentan los esquerdistas, a saber: el uso de hormigón tintado en cobre que ya perdió el color; que se han reutilizado materiales del anterior paseo a pesar de su deterioro; y, el mantenimiento de las farolas destrozadas que ya existían antes de la obra “sin siquiera limpiarlas mínimamente”.
Para la formación esquerdista “esta obra solo puede ser entendida como un despropósito” debido a la falta absoluta de “supervisión” y “la inacción a la hora de mantener la playa”.
Critican a su vez que tampoco se hayan tomado medidas para la eliminación del “cadillo”, una planta invasora cuyos pinchos se esparcen por la arena y todo el paseo, y que causa heridas a bañistas y paseantes, además de pinchar neumáticos de bicicletas que recorren el paseo.
Y aprovechan además para denunciar el abandono del parque infantil de la playa, con muchos columpios desvencijados.