La conversión del Bouza Brey en el primer Centro Integrado de Formación Profesional (CIFP) de O Salnés está causando gran revuelo en la comunidad educativa de Vilagarcía. Y es que al trajín de obras y preparativos que debe acometer el instituto para poder acoger en septiembre a todo el alumnado de los once ciclos de FP que se estrenarán en Fontecarmoa (siete procedentes de otros centros y cuatro nuevos) se suman las reticencias de determinados colectivos a cambiarse de emplazamiento.
Ayer por la tarde se reunía primero el Claustro y después el Consello Escolar del instituto de Carril para consensuar medidas
Así, tras las quejas -respaldadas por En Común- de un grupo de padres del Bouza sobre el traslado de sus hijos (de ESO) al Cotarelo Valledor, ahora son los estudiantes del ciclo de Acondicionamiento Físico del Miguel Ángel González Estévez (MAGE) los que manifiestan su “absoluta disconformidad” con su mudanza al nuevo CIFP. De hecho ayer por la tarde se reunía primero el Claustro del instituto carrilexo y después el Consello Escolar para posicionarse sobre este asunto y decidir las medidas a tomar.
El alumnado matriculado en el ciclo deportivo que lleva impartiéndose más de veinte años en Carril ha elaborado un escrito en el que explica los motivos de su rechazo a la nueva ubicación. Considera que la Consellería de Educación ha procedido “de modo autoritario” y “sin tener en consideración el parecer del alumnado ni del profesorado titular que imparte esta formación”.
Pabellón exclusivo
Los estudiantes están convencidos de que la formación que recibirán en el CIFP será de peor calidad que la actual. Por una parte, porque las instalaciones de las que disponen ahora en Carril “son las mejores de toda Galicia” para Acondicionamiento Físico, ya que cuentan con un pabellón en exclusiva, por lo que dejar de usarlo supondrá “un estrago del gasto público invertido”.
Los profesores no se trasladan al Bouza
Por otra parte está el profesorado, que a priori no se trasladará con el alumnado del ciclo para Fontecarmoa. “El equipo docente actual tiene acreditada su especialización en las materias impartidas, ya que lleva formando sucesivas promociones de alumnado en este ámbito deportivo desde 1996. Por el contrario, es imposible garantizar que el profesorado que se responsabilice de las materias específicas del currículo de nuestro ciclo en el nuevo centro pueda acreditar la especialización necesaria, por ejemplo, en Hidrocinesia, Fitness, Yoga, Pilates, ...”.
El alumnado de Acondicionamiento Físico llega a calificar su traslado de “disparate pedagógico que supone primar las motivaciones políticas por encima del derecho de la ciudadanía a una enseñanza pública de calidad”. De hecho se sienten víctimas de “un agravio comparativo” frente a estudiantes de FP del Cotarelo, como los de Informática, que podrán continuar en su instituto.
El nuevo horario: de tarde
Otro de los factores que rechazan de plano es el cambio de horario, ya que el ciclo del MAGE que ahora se imparte de mañana probablemente se pase a la tarde en Fontecarmoa. Esto supondrá “la incompatibilidad de conciliar la práctica deportiva federada”, ya que los entrenamientos se realizan en horario vespertino.
Así, lamentan que de seguir adelante el proyecto de su traslado, “el detrimento de la calidad formativa repercutiría drásticamente en nuestro acceso al mercado laboral”.
Vela y baloncesto comparten materias y deben continuar de mañana
En el Bouza Brey se imparten actualmente los ciclos técnico-deportivos de Vela y Baloncesto, ambos en horario de mañana, ya que comparten un bloque común de materias y las clases prácticas de Vela no pueden desarrollarse por las tardes, sobre todo en invierno, porque la noche cae demasiado pronto y los alumnos no podrían salir al mar.
Las fuentes educativas consultadas señalan que sí hay cabida en Fontecarmoa para el ciclo superior de Acondicionamiento Deportivo procedente de Carril, pero en horario de tarde, ya que impartir los tres ciclos deportivos de mañana supondría tener que depender de instalaciones ajenas al CIFP.
En lo que respecta al profesorado, tiene prioridad el centro receptor, es decir, en el caso de la FP, el Bouza Brey. Actualmente dos docentes del departamento técnico-deportivo realizan labores de dirección, por lo que no dan clase y existe la posibilidad de que los dos profesores de Carril siguiesen dando materias a los alumnos de Acondicionamiento Físico en el CIFP, pero solo de forma provisional, mientras aquellas dos personas continúan en el equipo directivo, pues una vez se desprendan de esas responsabilidades podrían retomar las clases.
Aulas más numerosas en el Cotarelo, que pasa a línea 4
La transformación del Bouza Brey en un CIFP conllevará el trasvase de más de medio millar de estudiantes. A los 278 de ESO y Bachillerato que se trasladarán del instituto de Fontecarmoa al Cotarelo Valledor hay que sumar los 223 de la rama de Comercio y Marketing que realizarán el recorrido inverso.
Del Castro Alobre se mudarán al Bouza los 26 alumnos del primer curso de Cuidados Auxiliares de Enfermería (los de segundo ya terminan antes del cambio). Ocurre lo mismo con los de Acondicionamiento Físico de Carril, cuyos treinta estudiantes de primero también se desplazarán al CIFP (los treinta de segundo ya no se verán afectados por el traslado).
Con respecto a la situación del Cotarelo, el centro receptor del alumnado de ESO y Bachillerato del Bouza Brey, se convertirá en un instituto de línea 4, salvo en 2º de ESO, que tendrá cinco grupos, según confirma el director. Teniendo en cuenta que el Bouza era de línea 2 y el Cotarelo de 3, la fusión de ambas en una línea 4 supondrá que algunas aulas serán más numerosas que las actuales; no obstante siempre cumpliendo las ratios, que se sitúan en un máximo de treinta estudiantes en Secundaria y 33 en Bachillerato. Ignacio Castro avanza que se intentarán realizar desdobles al menos en las “áreas instrumentales”.