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El CSIC quiere descartar la presencia de cobre en los bancos marisqueros de Carril

Forma parte del estudio encargado por la empresa minera de Touro | La Cofradía de Carril vigila que se cumpla el protocolo

Una experta del CSIC recoge muestras de los sedimentos existentes en diferentes zonas de los parques de cultivo de Carril. | // IÑAKI ABELLA

Expertos del Instituto de Investigaciones Marinas del CSIC y el presidente de la asociación de parquistas de Carril, José Luis Villanueva, recogieron en la mañana de ayer muestras de sedimentos de la ría de Arousa en el tramo final de la desembocadura del Ulla para llevar a cabo el estudio encargado por la empresa Cobres de San Rafael que pretende reabrir la mina de cobre en el municipio de Touro.

El CSIC recoge las primeras muestras de sedimentos en el tramo final del Ulla

La acción, dirigida por doctor Ricardo Prego, se enmarca en el plan de monitorización ambiental del cauce fluvial acordado por la entidad pesquera y la firma minera, que permitirá conocer los diferentes tipos de depósitos en el fondo.

La empresa ha presentado varios informes recientes que desvinculan de su actividad los registros de contaminación que se pueden observar en el río, que atribuye a vertidos urbanos o industriales procedentes de Padrón y Pontecesures, sobre todo.

La mina de cobre de Touro se encuentra emplazada a unos 62 kilómetros de la ría de Arousa, pero algunos de los regatos próximos a la balsa de decantación de la anterior explotación minera cerrada en 1986 son afluentes del Ulla por lo que se generó una gran preocupación en colectivos de defensa de la ría de Arousa.

Por este motivo, la entidad que plantea recuperar la explotación del cobre han realizado un análisis de las aguas a lo largo de todo el recorrido fluvial, comprobando que el pico más elevado de contaminación por metales se encuentra a la altura de la comarca del Deza, pero que río abajo apenas se observa la presencia de los mismos.

El doctor del CSIC acompañado por otra experta recogieron ayer las muestras en los parques de cultivo de Carril para determinar la composición de estos sedimentos y determinar si existe cobre y otros metales pesados atribuibles a la actividad minera.

La empresa también inició la pasada semana un proyecto de regeneración de los cauces más próximos a la futura explotación. A La vez se comprometió a instalar una sonda que analizará la presencia de todos los elementos del agua de forma constante y que determinará el estado de la misma.

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