Los carburantes subirán, pero no de forma inmediata

Un vehículo reposta carburante en una estación de O Salnés / a.M.
Los carburantes subirán de precio a consecuencia de la guerra, pero tampoco lo harán de la noche a la mañana y de una forma abrupta. Esta es la opinión al menos de un profesional del sector como Diego Vecoña, gerente de una céntrica gasolinera de Cambados. “Los precios no subirán una exageración porque no todo el crudo sale de Rusia, pero al cotizar en Bolsa será inevitable que se produzca una cierta subida”, vaticina.

José Luis Vilanova, presidente de FECA. | // IÑAKI ABELLA / a.M.
En los últimos días, han sido muchos los que acudieron a las estaciones de servicio para llenar el depósito, por miedo a que en los próximos días se produzca una escalada de precios nunca vista. Diego Vecoña también ha percibido ese inusual aumento de afluencia en su gasolinera.
Los carburantes están en máximos históricos, al igual que la energía eléctrica, y también esta se encarecerá, pues los precios de la electricidad dependen de los del gas, y este ya se ha puesto por las nubes al ser Rusia uno de los grandes productores mundiales. Manuel Goday, administrador de Goday Energía, una empresa que distribuye energía eléctrica principalmente en A Illa, advierte de que las consecuencias ya se están notando. “El precio de la energía ya ha subido estos días, de modo que la repercusión ya será inmediata. Estas cosas se sabe como empiezan, pero no como acaban”.
Los precios altos pueden estrangular también a las pequeñas distribuidoras, como la suya, que tienen un menor margen de maniobra para ofrecer descuentos y ofertas que las grandes compañías. “Algunos clientes se marchan, pero muchos vuelven porque después no es como les prometieron”.
En cualquier caso, él no cree que el conflicto bélico vaya a notarse con carácter inmediato, “porque por el momento las empresas distribuidoras tienen producto almacenado”, pero sí está convencido de que en cuestión de una o dos semanas los combustibles experimentarán una ligera subida. “Quizás un céntimo a la semana, o cada dos semanas… A corto plazo no lo notaremos demasiado, pero a largo sí, porque al pasar unos meses estaremos pagando la gasolina o el gasoil varios céntimos por litro más caros”.
Durante la jornada de ayer, la gasolina de 95 octanos se despachaba en las estaciones de servicio arousanas a precios de entre 1,487 euros el litro y 1,664; y el gasóleo de automoción estaba a entre 1,377 y 1,599 euros el litro.
El empresario Pedro Mouriño es el cónsul honorario de la Federación de Rusia en Galicia. Apunta que las sanciones que la Unión Europea y Estados Unidos están imponiendo a Rusia no serán inocuas, y que tendrán un efecto “boomerang”. “Las sanciones afectarán a Rusia, evidentemente, pero también al sancionador”. En este sentido, plantea que el escenario económico que se genera ahora, “también va a afectar al señor de Vilagarcía”, metáfora con la que quiere hacer ver que en un mundo globalizado como el actual lo que sucede a miles de kilómetros de distancia puede tener repercusiones en Galicia. En este sentido, da por hecho que habrá una subida de precios en determinados productos, con lo que esto supone: un aumento de la inflación, que ya se descontroló durante 2021. Hay que tener en cuenta que Rusia es un país crucial en el comercio planetario, habida cuenta, por ejemplo, de que es el primer productor mundial de trigo y el segundo de aluminio primario y el mayor exportador de fertilizantes. Pedro Mouriño señala que las sanciones tienen un efecto evidente en el comercio bilateral, y apunta a modo de ejemplo que antes de 2014 las transacciones entre España y Rusia tenían un valor de unos 14.000 millones de euros anuales. No obstante, tras los castigos económicos por la anexión de la península de Crimea, ese comercio se contrajo hasta los 4.000 millones anuales. Ahora estaba empezando a crecer de nuevo, poco a poco, y rondaba los 6.000 millones. También se muestra muy preocupado José Luis Vilanova, presidente de la Federación de Empresarios da Comarca de Arousa (FECA). “Hoy en día, desgraciada o afortunadamente, cualquier medida que se tome contra un país tendrá contrapartidas negativas para los demás”. Por ello, vaticina que, “todas las medidas que se tomen contra Rusia nos van a afectar en mayor o menor medida”, en alusión al tejido empresarial de O Salnés. Los sectores del vino y de la conserva, en el ramo agroalimentario, o el de extrusión de aluminio, en el industrial, son algunos pilares económicos de Arousa que se verán dañados.
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