A la espera de que Beatriz Castro comunique oficialmente su intención de no presentarse a la reelección y apartarse de la presidencia del partido –lo hará más pronto que tarde–, los críticos del PP que desde hace días reclaman un congreso urgente en el que buscar un relevo esperan ahora que los barones conservadores en la provincia y Galicia tomen cartas en el asunto.
Esta misma semana acude a la villa meca el presidente provincial del partido, Alfonso Rueda, para reunirse con los responsables de la agrupación local y abordar la estrategia a seguir.
Un proceso en el que, por otra parte, los conservadores deberán tener muy presentes, para no caer de nuevo en ellos, los errores que cometieron cuando gestaron el relevo de Miguel Pérez y dieron las riendas de la formación a Beatriz Castro.
Las heridas abiertas entonces nunca cicatrizaron, de ahí la importancia de este nuevo proceso renovador y de la visita de Rueda, pues puede ser un primer y decisivo paso para encauzar esa ansiada renovación que sirva para planificar las elecciones de 2023.
A la espera de acontecimientos, los militantes que exigen ese cambio insisten en que “antes se hacía oposición, pero ya hace mucho que no hay nada de nada, al menos por parte de nuestro partido”.
Recuerdan que “incluso cuando Beatriz Castro llegó al cargo y se convirtió en portavoz municipal presionaba al gobierno socialista y fiscalizaba su labor, pero hace mucho que dejó de hacerlo”.
Fernando Meis
Al margen de insistir en la “tibieza” del PP como oposición en asuntos como el PXOM o el Auditorio Municipal de Monte da Vila, los miembros del partido que abogan por el cambio en la dirección recuerdan que “exconcejales como Fernando Meis y el propio Miguel Pérez, cuando tuvo que irse de la Alcaldía a la oposición, marcaban el terreno al gobierno del PSOE”.
Añaden que “la presión era contundente en todo lo relacionado con el PXOM” y recuerdan que “incluso algunos de nuestros concejales se reunieron con diferentes conselleiros para hacer gestiones por el pueblo, pero toda esa labor de oposición parece haberse diluido y ahora es como si el PP no existiera y solo Esquerda Unida asumiera la responsabilidad de hacer oposición”.
