El rediseño de los espacios públicos es una de las señas de identidad del actual gobierno municipal de Vilagarcía, tal y como reflejaron con sus actuaciones en las plazas de Galicia y de la Independencia, en la calle Camilo José Cela o con la creación del paseo marítimo de Canelas. Y el año próximo continuarán en esta senda. Así lo anunció ayer el alcalde, Alberto Varela, que realizó un balance del último año en una conferencia de prensa, en la que sostuvo que, “podemos estar moderadamente satisfechos de lo conseguido en este 2021”.
Para Varela, lo más destacado de los últimos doce meses fue, “la recuperación del diálogo y el entendimiento” entre el Ayuntamiento y el Puerto de Vilagarcía, que fue posible tras la llegada del cambadés José Manuel Cores Tourís a la presidencia del ente portuario. Un entendimiento que se ha traducido en la compra por parte del Ayuntamiento de la antigua Comandancia de la Marina, para trasladar a esa parcela el centro de salud; y de un terreno de O Ramal en el que se ubicará una nueva zona verde o las piscinas de agua salada inicialmente previstas en la playa.
A renglón seguido, el regidor de Vilagarcía hizo mucho hincapié en el modelo de ciudad que defiende su ejecutivo, en el cual “los ciudadanos seamos los protagonistas del espacio público, no los vehículos”. Por ello, anunció que en lo que resta de mandato habrá más humanizaciones (término que Varela prefiere al de peatonalización) y ciclovías.
Eso sí, Alberto Varela solo avanzó que se va a actuar en la calle Arzobispo Lago, donde está previsto que la peatonalización arranque en los primeros meses de 2022. Sobre las ciclovías, manifestó que el Ayuntamiento, “tiene un plan”, pero prefirió no dar detalles de donde se ubicarán, hasta que haya financiación para poder ejecutar la próxima obra. Eso sí, manifestó que la necesidad de obtener fondos de otras administraciones para extender los carriles bici urbanos probablemente impidan ampliar las actuales ciclovías el año próximo.
En cualquier caso, Alberto Varela hizo mucho hincapié en su comparecencia en la necesidad de buscar, “una movilidad alternativa, ecológica y verde”, y recordó que hace años que las ciclovías existen en muchas capitales europeas. “Ese es el camino”, señaló, para añadir que, “en Vilagarcía no somos los primeros en apostar por las ciclovías, pero desde luego que tampoco vamos a ser los últimos”.
La pandemia
A la hora de hacer balance de la gestión de un año como 2021 eran inevitables las referencias a la pandemia de COVID. Sobre esto, Varela empezó haciendo hincapié en la voluntad del Ayuntamiento de colaborar con el Sergas, lo que se plasmó en la cesión de espacios como el pabellón de Fexdega, la antigua Comandancia o el Auditorio para la vacunación y los cribados.
El regidor se detuvo también en el refuerzo de los servicios sociales, para atender la situación extraordinaria derivada de la irrupción del SARS-CoV-2. “El presupuesto en servicios sociales se incrementó un 90 por ciento con este gobierno”. A continuación, destacó el apoyo a la creación de empleo y los pequeños negocios locales, con programas como de ayuda a la formación o los exitosos bonos “Son da casa”.
Proyectos para 2022: el albergue de peregrinos, la humanización de Arzobispo Lago, la nueva biblioteca y el arreglo del pabellón de Fontecarmoa
El alcalde ensalzó también la consecución mediante concurrencia competitiva de 2,4 millones de euros de los Next Generation, la recuperación del tren directo de Vilagarcía a Madrid, el inicio de la segunda fase de rehabilitación del paseo marítimo o las obras de saneamiento en el rural, citando las de Pedramogueira, Verderol o A Pena. “El 99 por ciento del Concello cuenta con saneamiento, y esto es algo a lo que no llegan muchas ciudades”.
En lo que se refiere a los planes de su ejecutivo para 2022, Varela mencionó algunas actuaciones ya anunciadas anteriormente, como la humanización prevista en Sobrán, el albergue de peregrinos de Carril, la nueva biblioteca de la calle Castelao, la reforma del pabellón de Fontecarmoa o la ya citada reurbanización de Arzobispo Lago.
A mayores, apuntó que se está buscando financiación para rehabilitar la casa Jaureguízar (que será un centro social para mayores), y que en unos meses ya se verán cambios en O Ramal, pues la demolición de las naves abandonadas no se va a demorar.
