Los mejilloneros advierten de que “nunca” van a renunciar a acudir a las rocas del litoral gallego en las que recogen la mejilla (semilla) que necesitan para encordar sus bateas.
Desafían así a la Consellería do Mar, después de que iniciara el proceso para limitar sus zonas de actuación, y pronostican que, tras la manifestación desplegada la semana pasada en A Illa de Arousa, el siguiente paso será acudir a las rocas de siempre, lo cual puede desencadenar enfrentamientos en la costa con los percebeiros y cofradías que tratan de impedirles acceder a la cría.
Esta es una de las conclusiones que pueden extraerse de las reuniones mantenidas en los últimos días por el sector mitilicultor en diferentes muelles gallegos.
Encuentros en los que se acordó pedir “una reunión urgente” con el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, “para informarle directamente de lo que puede ocurrir en próximas fechas si no se cambia la decisión tomada por la Consellería do Mar”.
Es lo mismo que dicen haber transmitido también a la Subdelegación del Gobierno, haciendo constar que, “de seguir así”, pueden producirse enfrentamientos en las piedras “muy pronto”.
Lo cierto es que cada vez son más los bateeiros que apuestan por actuar y adoptar “decisiones drásticas” de inmediato.
Pronostican una significativa caída de producción
El sector bateeiro pronostica que, de mantenerse la postura de la Consellería do Mar en cuanto a limitación de las zonas de obtención de cría, durante los próximos años se registrará una significativa caída de producción.
Y no solo eso, sino que dicen estar convencidos de que la titular de Mar, Rosa Quintana, “es consciente de ello”.
e ahí que sugieran que “cabría preguntarle si dispone de datos que permitan cuantificar esa caída y, consecuentemente, cuáles son las cifras que maneja sobre el incremento de las cantidades de percebe extraído tras reservarle zonas de trabajo”.
En definitiva, “la Consellería debería explicar sus estimaciones sobre el coste y los beneficios de las medidas adoptadas tanto para el sector bateeiro como para los percebeiros”.
Los dirigentes del sector que capitanean este proceso reivindicativo están de acuerdo, aunque acordaron “esperar hasta los primeros días de enero para hacer valer nuestro derecho a recoger mejilla y defenderlo por todos los medios a nuestro alcance”.
Dicho de otro modo, que será el mes que viene cuando se intensifique la presión en la costa para seguir reclamando lo que consideran “un derecho histórico que nos ha sido arrebatado por la Consellería do Mar de acuerdo con los percebeiros y un puñado de cofradías que quieren hacer negocio a nuestra costa”.
Es evidente que la tensión y la crispación que caracterizan a la histórica “guerra de la mejilla” siguen en aumento, y todo indica que irán a más a medida que aumenten las necesidades de cría.
“Proponer hatcherys es reconocer que nos deja zonas insuficientes”
Hace semanas, cuando la “guerra de la mejilla” solo empezaba a calentar motores, ya se explicó que la Consellería do Mar ofrecía alternativas a los bateeiros, tales como la instalación de criaderos de semilla (hatcherys), un incremento de las cuerdas colectoras destinadas a la captación de larvas de mejillón, la dotación de polígonos específicos para favorecer esa fijación o la supresión de la veda, para que pueda recolectarse cría durante todo el año.
Este ofrecimiento es, a juicio de los bateeiros, “un reconocimiento explícito por parte de la Consellería de que las zonas que nos deja para la extracción de mejilla serán insuficientes para abastecer a todas las bateas, pues si las considerase suficientes ya no sería necesario tal ofrecimiento”.
Por si no fuera suficiente, esgrimen que, “de ser factible instalar hatcherys, habría que esperar varios años hasta que estuvieran operativas, pues la tecnología para la producción de mejilla no está desarrollada”.
Asimismo, el sector destaca el alto coste de esa producción, pues el proyecto “Blue Seed”, financiado por la UE y en el que participaron la Xunta y la Organización de Productores de Mejillón de Galicia concluye que “el coste de producción de semilla es de 0,31 euros por kilo para la recogida en las rocas, de 1,35 por kilo en el caso de la obtenida en colector y de 430 euros por kilo de semilla de mejillón de hatchery, siendo el precio medio de venta del mejillón en 2020 de 0,43 euros.
En el llamado Clúster del Mejillón, participado por organizaciones como FARN, Opmega, Amegal, Cabo de Cruz, Amegrove, Femex y A Illa, se refieren a ello diciendo que seguirán adelante con sus reivindicaciones “de forma pacífica”.

Eso sí, aunque dicen no desear “que suene a amenaza o advertencia”, recalcan que “son muchas las familias a las que se pone en una situación muy difícil, de ahí que se teman conflictos en las piedras que todos lamentaremos, pero que no tienen más responsable que una Consellería que negoció arbitrariamente con los derechos de un sector que siempre se mostró como un ejemplo a seguir”.
Presentarán recursos y no descartan acudir a Bruselas
Al margen de empezar a posicionarse para presionar en las rocas del litoral y poder recoger la mejilla como hicieron hasta ahora, los bateeiros pretenden plantar una fuerte batalla judicial frente a la implantación de las zonas de exclusión a las que desde ahora se verán sometidos.
Ya se explicó en anteriores ocasiones que la limitación de las zonas de extracción de semilla o mejilla lleva parejo el establecimiento de áreas acotadas, para que las cofradías de pescadores puedan explotar el percebe o extraer ellas mismas la cría de mejillón para después venderla a los bateeiros.
“No renunciamos a la recolección de cría en las piedras habituales”
Las organizaciones de productores mejilloneros Federación Arosa y Norte, Opmega, Amegal, Cabo de Cruz, Amegrove, Femex y A Illa cargan contra la decisión de establecer zonas de exclusión para la mejilla.
Por eso arremeten contra la Consellería do Mar y dejan claro que no aceptan su propuesta por considerarla “dañina para un sector que siempre fue ejemplar y se presentó como tal”.
Resaltan que sus concesiones bateeiras “nos brindan unos derechos a los que no vamos a renunciar porque de forma arbitraria se quiera favorecer a otro sector”.
Adoptan así una posición de firmeza que lleva al sector a sentenciar: “No renunciamos a la recolección de mejilla en las piedras habituales”.
Como tampoco renuncian a “iniciar todo tipo de reclamaciones en vía judicial”.
Esto se regula mediante los planes específicos de explotación que aprueba la Consellería do Mar.
Pues bien, la intención de los mejilloneros es presentar recursos contra absolutamente todos esos planes y acudir a la vía judicial para frenarlos.
“Llegaremos hasta donde sea necesario, y si hace falta ir a los tribunales europeos también lo haremos”, explican los dirigentes del sector tras las últimas reuniones mantenidas a pie de puerto.
“No hizo falta un desastre para acabar con nuestra seguridad”
La conselleira Rosa Quintana defendió en varias ocasiones la necesidad de que el sector bateeiro busque formas de aprovisionarse de mejilla diferentes a su recolección en el litoral, argumentando que, en caso de vertidos como el del petrolero “Prestige” u otro desastre natural, la cría podría desaparecer de las rocas.
Frente a esto, los bateeiros responden que “no hizo falta ningún desastre natural, sino que bastó con la implantación de las zonas de reserva, para acabar con la seguridad que siempre tuvo nuestro sector en cuanto a un abastecimiento de mejilla suficiente para desarrollar cada ciclo de cultivo”.
De igual modo, argumentan que “cuando la conselleira baraja la posibilidad de algún desastre natural que haga desaparecer la mejilla de las rocas, es consciente de que es muy alta la probabilidad de que tal desastre afecte en igual medida, o incluso superior, tanto a la mejilla capturada con colectores como a los individuos adultos de mejillón”.
Es por ello que los representantes de los bateeiros se preguntan “qué fundamentos científicos sostienen la hipótesis de que se pueda producirse un desastre que afecte exclusivamente a la mejilla de roca y no incida sobre el resto del ciclo productivo del mejillón”.
Y terminan pidiendo a la Consellería do Mar que explique o muestre los proyectos o iniciativas que ha desarrollo desde el año 2009 para hacer frente a posibles situaciones de desabastecimiento de cría.