El ambiente que se vivió ayer en las calles de Vilagarcía no tenía que ver con el de las jornadas precedentes. Debido a la lluvia, el bullicio del jueves se transformó ayer en un paisaje de calles silenciosas y semivacías. Esto afectó negativamente a los artesanos que abrieron sus puestos en el Mercado de Nadal, puesto que apenas tuvieron actividad comercial.
El Ayuntamiento instaló sendos hilos musicales en las plazas de España y A Independencia, en las que se han repartido las casetas de venta, pero ni siquiera estas melodías ayudaron demasiado a animar a los consumidores. En todo caso, las previsiones meteorológicas apuntan a una mejoría para el fin de semana, con lo que se espera que la afluencia al Mercado de Nadal también aumente.
En la Praza de España, los visitantes encontrarán desde productos de alimentación o vino hasta libros o unos preciosos adornos navideños hechos a mano. En la plaza de A Independencia también hay puestos de alimentos artesanos, así como otros de decoración o marroquinería.
En Cambados, el Mercado de Nadal es más pequeño, al estar compuesto únicamente por siete puestos, todos ellos regentados por comerciantes de la localidad. Pero se celebra bajo una carpa en el parque de Torrado, lo que lo mantiene a salvo de las inclemencias meteorológicas. También se inauguró ayer, y estará abierto hasta el domingo.
En la villa del albariño incorporan hoy otro ingrediente a su oferta de ocio prenavideño, y será la ostra. El Club Juventud Cambados, de fútbol, organiza una nueva edición de estas jornadas de degustación, y los puestos funcionarán entre las 12.30 y las 15.00 horas en las plazas de Alfredo Brañas y As Rodas, y en la Rúa Real.