Las camelias que anticipan la Navidad con el mejor perfume de Rubiáns
La flor de las Rías Baixas, protagonista en el pazo de Rubiáns. | // I.A. / A.touriño
La flor de la Sasanqua, conocida también como camelia de Navidad, ya brotó hace algo más de un mes, “al finalizar la vendimia”, en los jardines del pazo de Rubianes, jalonados por una colección que supera con creces los 5.000 ejemplares de las más variadas especies, explica con satisfacción el gerente del histórico Jardín de Excelencia Internacional Guillermo Hermo.
Semillas que se recogen para la fabricación de aceites y cosméticos / Noé Parga
Son 18 los ejemplares del madrugador arbusto los que se entremezclan en la llamada avenida del Duque de Camiña, un homenaje personal y amistad que le concedió en su día el señor de Rubianes cuando a principios del siglo XIX introdujo esta especie en los jardines de la noble casa vilagarciana, pues se cree que las primeras plantas llegaron desde Portugal.
Señorial pazo de Rubianes situado en la entrada a Vilagarcía de Arousa / Iñaki Abella
Sin duda una maravilla que casi por casualidad entró en Galicia y que gracias al pazo de Rubiáns se extendió como la pólvora hasta convertirse en la “Flor de las Rías Baixas”, como tantas veces la denominó el mayor experto hasta el momento y ya fallecido Odriozola.
Ambiente mágico en el jardín
Guillermo Hermo destaca sus enormes propiedades partiendo de la base de que la Sansaqua “es olorosa” y deja un perfume mágico en un jardín en el que se mezclan y cohesionan los aromas de ejemplares únicos, sin solaparse, dejando un ambiente especial, cálido y mágico, casi irrepetible
Es la Sansaqua la gran protagonista del otoño entre ese excepcional cuento de camelios, de visita obligada al entrar en Vilagarcía, aunque no sea hasta dentro de un mes o algo más cuando se produzca la eclosión floral de la camelia, cuando entre el verde de los árboles eclosionen las espectaculares flores, de todos los tamaños, geometrías, colores e incluso tactos suaves y aterciopelados.
El atractivo de la camelia es un factor clave en las nuevas tendencias del turismo más en boga tras la pandemia y Pazo de Rubianes en absoluto es ajeno a este bum que supone haber triplicado el número de visitas a sus jardines con respecto al mismo período de hace dos años. “La eclosión es brutal” explica el gerente del pazo de Rubianes al señalar que los visitantes de esta época del año tienen tres destinos incuestionables, a saber: Santiago de Compostela, la Ribeira Sacra y Rías Baixas. Un comportamiento que, asegura, “a nosotros en el pazo de Rubianes nos obliga a mantener la plantilla al completo para atender las visitas, pues los fines de semana hemos triplicado el número de clientes procedentes de distintos puntos de España”. “Esta misma semana hemos recibido a grupos de Girona o de Palma de Mallorca que además marchan con un nivel de satisfacción tremendo cuando recorren estos espacios naturales”.
Los turistas quedan maravillados con la espectacularidad y variedad floral / Iñaki Abella
Y entre ellas brotará la espectacular “crisanta amarilla”, una de las “más difíciles de reproducir y que hace unos veinte años conseguimos en los jardines del Pazo de Rubianes aunque ahora ya se puede ver en otros espacios botánicos de Galicia”, explican los cuidadores de la excepcional finca en la que se conservan magnolios, araucarias y una formación de eucaliptos incluidos en el "catálogo de especies senlleiras de Galicia".
El mejor té de la historia
En el recorrido por este paraíso de cuna asiática no podía faltar la “camellia sinensis”, conocida porque de sus hojas se extrae uno de los tés más exquisitos y con estupendas cualidades medicinales.
“De ahí sale el té rojo, el blanco, el negro, el gris o el verde, excepcionales para tratamientos diversos”, presumen en la finca, tanto en tratamientos renales, para el pecho o la limpieza de la piel. Un lujo en toda la extensión de la palabra que merece sin duda el regreso de los certámenes para su divulgación y su contemplación casi espiritual
El uso de cosméticos con aceite de camelia se ha convertido en un furor en los últimos años por unas beneficiosas propiedades que han descubierto sobre todo los jóvenes, hoy el grupo más numeroso de clientes de esos productos naturales. Hermo estima que el 70% de los productos a la venta, jabones y aceites, son adquiridos por una población de 25 a 40 años, cuando lo lógico sería pensar en personas de edad avanzada, más proclives a tratamientos naturales frente a otros industriales. “El aceite de camelia se usa desde hace miles de años en el continente asiático, sobre todo chinos y japoneses que conocían muy bien sus propiedades para el pelo -retrasa las canas- y el cuero cabelludo”, explica Hermo quien también subraya sus bondades como tratamientos tópicos para enfermedades dermatológicas como la psoriasis. Se trata de productos muy asequibles que se pueden adquirir en un rango de entre seis euros un jabón de camelia a 30 para un frasco del mejor óleo.
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